Chipperfield diseñará el principal edificio de la Copa América

Diana Montero
Valencia

Rita Barberá, como presidenta del jurado y alcaldesa de Valencia, ha desvelado el veredicto definitivo. El edificio de invitados de la Copa América, el parque de la dársena del puerto y el aparcamiento llevarán el sello de David Chipperfield. Después de una maratoniana reunión, que se prolongó durante doce horas, el jurado se decantó por unanimidad por la propuesta más barata, ya que el conjunto se licitó por 36 millones de euros, y finalmente ha sido adjudicado por 35,10 millones.

Barberá ha señalado que las posibilidades que ofrece el conjunto a largo plazo han sido el principal argumento para su elección. La alcaldesa ha destacado su “versatilidad y flexibilidad para adaptarlo a las necesidades de futuro que tenga la ciudad”, y lo ha catalogado de “sólido, elegante y minimalista”.

Fermín Vázquez, codirector del proyecto junto a Chipperfield, satisfecho por esta decisión, ha destacado que se trata de una obra que “requiere un gran esfuerzo, por lo que será necesario formar un equipo multidisciplinar con especialistas en estructuras, iluminación, paisajismo, e incluso acústica”. En el edificio principal destacan las grandes terrazas y voladizos, que le otorgan fuerza, a pesar de su pequeño tamaño.

Zonas públicas.- Una de sus principales preocupaciones ha sido la de dotar al complejo de espacios para el público general, ya que el acceso al inmueble será restringido hasta el final de las regatas. Para ello, han concebido una plataforma mirador a lo largo del espigón, con dos zonas ajardinadas, que conectarán con la playa de la Malva-rosa. Además, cerca de mil personas podrán contemplar la competición desde una grada, situada entre la playa y el parque.

La decisión del consorcio atribuye también a estos profesionales el diseño del parque de la dársena del puerto y del aparcamiento principal.

Este conjunto es la primera obra de Chipperfield y Vázquez en la ciudad del Turia. El arquitecto inglés, fichado por Necso para optar a la concesión, desbancó a figuras como Jean Nouvel, que competía con Dragados, o Alejandro Zaera, que abanderaba la apuesta de Ferrovial. Sacyr respaldaba la propuesta del despacho alemán GMP.