El antiguo polígono Balmes de Sant Feliu tendrá 700 viviendas

El traslado de la empresa química Hoescht Ibérica hace dos años; el previsto de Estampaciones Colom, que aún mantiene su actividad en espera de alcanzar un acuerdo con el Ayuntamiento y las promotoras; el cierre de Gates Vulca; y unos terrenos junto al Media Park suman los 74.000 metros cuadrados del nuevo plan urbanístico que prevé reconvertir todo el área del polígono Balmes y el entorno de la calle Manso en una zona residencial con la construcción de 700 viviendas, un 40% de ellas de protección oficial (VPO).

Carácter social.- Parte de los pisos se destinarán a colectivos con especiales dificultades de acceso a una vivienda, como jóvenes y gente mayor. Siguiendo este criterio, la mitad de toda la promoción de VPO será de alquiler, en la que supone la primera iniciativa de este tipo que se ejecutará en Sant Feliu de Llobregat (Barcelona).

El planeamiento contempla la construcción de dos torres de once pisos de altura junto a la carretera Laureá Miró, con una arquitectura diferenciada con el objetivo de marcar la puerta de entrada a Sant Feliu. El nuevo barrio supondrá el crecimiento de la ciudad en unos 1.500 habitantes.

El pleno municipal ya ha aprobado la recalificación urbanística del sector para que pase de industrial a residencial. También se ha ratificado un convenio entre el Ayuntamiento y las promotoras Landscape Augusta y Landscape Promociones Inmobiliarias, que se encargarán de ejecutar el proyecto de este nuevo sector.

El plan urbanístico prevé también una zona verde que separará el área residencial de la industrial del municipio de Sant Just Desvern. Además, el Consistorio dispondrá de 4.000 metros cuadrados para construir un equipamiento aún por definir.

El Ejecutivo municipal ingresará 300.000 euros y la propiedad de la Torre Badal, que cede Media Park, a cambio de la recalificación de los terrenos industriales a residenciales. Esta masía se convertirá en un equipamiento situado en el entorno natural de la sierra de Collserola.

ICV, principal grupo municipal en la oposición, ha votado en contra de este plan, porque considera que la ciudad obtiene pocos beneficios de este planeamiento y pide que se eleve al 50% el número de pisos protegidos y se doblen los metros cuadrados de espacios libres destinados a la construcción de una escuela. También critica la altura de los edificios de viviendas planificados.