Loureda compra más acciones de Sacyr Vallehermoso

Así pues, el empuje vendedor de los inversores, sobre todo de los últimos días de la semana (del 15 al 22 de septiembre), han hecho que el principal selectivo español no pudiese aguantar el soporte técnico y psicológico de los 7.000 puntos y terminase cediendo hasta los 6.953,3 puntos, lo que supone perder prácticamente un 1,5%.
Por su parte, el Indice General de Construcción, como suele hacer en momentos de bajadas, volvió a ejercer de sector refugio, y se comportó bastante mejor que su hermano mayor, cediendo tan sólo un 1%, hasta situarse justo por debajo de su antiguo soporte, ahora resistencia, que posee en los 1.200 puntos, concretamente en los 1.196,5 puntos .
Dentro de las noticias empresariales de nuestro sector, esta semana podemos destacar fundamentalmente dos. Por un lado, la entrada en el capital del grupo Inmocaral de Alicia Koplowitz, que, con la compra del 5% de la compañía, aproximadamente 13 millones de euros a precio de mercado, se ha convertido en una de las principales accionistas de la antigua Fosforera.
El anuncio de la empresaria llega tan sólo cuatro días después de que el ex-presidente y fundador de la constructora Ferrovial, Rafael del Pino Moreno, confirmara la compra del 5,22% de Inmocaral, convirtiéndose así, en el segundo accionista del grupo.
Por otro, el presidente del grupo Sacyr Vallehermoso, José Manuel Loureda, ha elevado su participación en la compañía desde el 11,319% hasta el 11,615%, tras adquirir en los últimos días un paquete del 0,3% del grupo por unos 7,70 millones de euros. Esta es la segunda compra que realiza el máximo ejecutivo de la compañía en las últimas semanas, ya que, a principios de septiembre, adquirió otro paquete equivalente al 0,12% de la constructora.
Para la próxima semana, y teniendo en cuenta lo sucedido en las dos últimas, habrá que estar muy atentos a las alarmas de venta (stop loses), especialmente en aquellos valores que se han situado en estos últimos días cerca de sus soportes.
Aún así, y siendo algo optimistas, pensamos que lo normal sería que los índices experimentaran un ligero rebote, aprovechando los bajos precios en los que se han colocado los títulos.