PAÍS VASCO.- 27/12/2007 El Gobierno vasco apuesta por industrializar la construcción

El consejero de Vivienda y Asuntos Sociales del Gobierno vasco, Javier Madrazo, apuesta por la industrialización de la construcción para “avanzar hacia el objetivo de defecto cero en el sector”. Madrazo realizó estas declaraciones durante la visita a la primera promoción residencial pública con estructura industrializada, ubicada en el barrio de Zabalgana de la capital alavesa.
El consejero resaltó que este es uno de los principales objetivos de su departamento y de la sociedad promotora pública Visesa, eje que está recogido en el Plan Director de Calidad, Sostenibilidad, Seguridad e Innovación en la Edificación.
“Hay que tener en cuenta que seguimos construyendo con métodos artesanales que tienen lógicamente defectos en las obras”, apuntó Madrazo. En este sentido, apostó por “introducir de manera más directa la tecnología e incorporar rutinas más estandarizadas, que nos permitan avanzar en calidad, innovación y seguridad”. Además, subrayó que la industrialización implica construir por módulos, mediante rutinas de trabajo estandarizadas y con un mayor grado de participación tecnológica. De esta forma, se introducen elementos industrializados y se utilizan las tecnologías de la información y la comunicación aplicadas a la construcción.
Madrazo explicó que “la industrialización en la construcción se parece más a un laboratorio que a una obra, por eso estamos sustituyendo el buzo por la bata blanca, en la medida en que se trabaja directamente en fábrica y en la obra se monta directamente la estructura ya construida”.
Entre las ventajas de la industrialización, Madrazo destacó la reducción de la siniestralidad laboral del sector de la construcción, el abaratamiento de los costes, la reducción de los plazos de entrega de las obras y el hecho de que se evitan los defectos habituales que se producen en las obras tradicionales. En este sentido, aseguró que “en muchos casos logramos reducir a la mitad los plazos de ejecución de la obra y el consumo de energía que se necesita para llevar a delante una obra de esta envergadura”.
Asimismo, el consejero apostó por que el sector público vaya por delante, con una labor “ejemplificadora” y siendo “tractor para que se incorpore a esta nueva forma de construir dentro del sector”. Se trata de la primera promoción residencial pública de altura con estructura industrializada, con 156 viviendas sociales en el barrio de Zabalgana. “Hasta ahora hemos trabajado haciendo cerramientos interiores y fachadas, pero en esta ocasión se ha utilizado la industrialización en vigas y pilares”, explicó.
El proyecto se comenzó a gestar en 2005, a través de la “I Beca de investigación Visesa” sobre sistemas de estructura industrializada en edificios de vivienda colectiva, que se convoca con el objetivo de avanzar en los criterios de sostenibilidad, industrialización y estandarización en el campo de la vivienda.