Elerebro destinará 195 millones para ampliar su central térmica de Castejón

El anuncio fue hecho público ayer por Marcos Antuña, director de proyectos e inversiones de Hidrocantábrico, quien compareció ante los medios de comunicación junto a Nicanor Fernández, director de gabinete de la presidencia del grupo, y José Antonio García Martínez, responsable de la planta de Castejón.

Así, según indicó Antuña, "el proyecto se encuentra actualmente en fase de promoción y desarrollo" y en cuanto a sus trámites, "a la espera de obtener el visto bueno del Ministerio de Medio Ambiente, una vez superadas las alegaciones presentadas".

Y en cuanto al inicio de los trabajos de construcción, cuyo proceso de licitación está muy avanzado, el responsable de Hidrocantábrico aseguró que "confiamos en que en un plazo de seis meses podamos empezar las obra". A partir de entonces, la nueva planta podría entrar en funcionamiento en un plazo de dos años.

un alma gemela La ampliación de la central térmica de Elerebro consiste en la construcción de una segunda unidad que es prácticamente gemela a la que está operativa desde octubre de 2002. Una central de estas características se dedica a la producción de energía elécgtrica por medio de la combinación de las turbinas de vapor y las turbinas de gas natural, materia ésta que proviene del gaseoducto que conecta Barcelona con la Comunidad Autónoma Vasca (CAV).

En los dos años de actividad, la planta ha generado una producción de 3.000 millones de kilowatios/hora, ha consumido 6.000 millones de kilovatios de gas natural y no ha sufrido ningún tipo de incidente en las 190.000 horas de trabajo, en las que ha logrado trabajar al 98% de su rendimiento.

El proyecto, que ocupará un espacio de 5 hectáreas dentro de las 15 hectáreas con las que Elerebro cuenta en el polígonode Castejón, ya fue declarado el pasado mes de mayo por el Gobierno de Navarra como Proyecto Sectorial de Incidencia Supramunicipal (PSIS). Al igual que en la actual unidad operativa, de la fabricación e instalación de la turbina de gas se encargará la compañía suiza Alstom Power, que la entregará a Elerebro llave en mano, mientras que para el resto de componentes auxiliares se recurrirá a empresas españolas.

inversión global, 375 millones Respecto a la repercusión social y económica en la zona de la Ribera, Antuña señaló que "va a ser muy importante" y, de hecho, sumando los 195 millones de euros que Elerebro prevé destinar al segundo cuerpo de la central, la inversión global ejecutada superar los 375 millones (más de 62.000 millones de las antiguas pesetas). En la actualidad, según manifestó José Antonio García Martínez, director de la planta, la plantilla se compone de 45 empleados, a los que se suman otros 20 en labores de mantenimiento, además de un centenar de empleos en empresas auxiliares. La puesta en marcha de la segunda unidad elevará el empleo hasta los 65 puestos directos, en tanto que los indirectos podrían alcanzar los 150.

Además, durante los trabajos de construcción, Antuña estimó que "se llegará a un pico de hasta 600 personas trabajando, con lo que ello supone de generación de riqueza para el sector de servicios de Castejón y los pueblos de alrededor".

En cuanto al impacto de la planta en el entorno natural, Antuña señaló que "actualmente, estamos trabajando para obtener la norma de certificación medioambiental ISO 14001, que se sumará al aseguramiento de la calidad que supone contar ya con la ISO 9001".

Así, Antuña desgranó los aspectos que se tienen en cuenta, como la emisión a la atmósfera de óxido de nitrógeno, el control sobre la calidad del aire ambiental, la contaminación acústica, la calidad del agua vertida al río Ebro y el impacto de las torres de refrigeración, cuestiones todas ellas en las que, según señaló, la planta de Elerebro cumple escrupulosamente todas las exigencias legales.