Fadesa facturó 453 millones en 2002 y entregó un total de 3.235 viviendas

El grupo Fadesa ha cerrado 2002 con una cifra de negocio consolidada de 453 millones de euros, lo que supone un incremento del 91% sobre los resultados de 2001. Este es uno de los mayores crecimientos experimentados por la compañía gallega desde su constitución.
El beneficio bruto de Fadesa ha sido de 82 millones de euros (55 millones después de impuestos), habiendo entregado un total de 3.235 viviendas.
En cuanto al stock de contratos de la inmobiliaria a finales de diciembre, es de 751 millones de euros, equivalentes a 5.466 viviendas en proceso de construcción. Esta cifra, junto con la de los nuevos contratos que se realicen en el futuro, permite la estimación de crecimiento de la actividad del grupo para los próximos ejercicios.
El factor principal que ha influido en el crecimiento de Fadesa ha sido la determinación como motor de la división inmobiliaria, que ha aportado el 95% de la actividad. El 5% restante corresponde a las divisiones patrimonial e industrial que, aunque están en su fase de inicio, han logrado incrementos de más del 50% respecto al año anterior.
La actividad promotora ha alcanzado una cifra de ingresos de 431 millones de euros, con un crecimiento del 93% sobre 2002. Uno de los motivos fundamentales que explica este aumento en la promoción ha sido la política de diversificación, tanto geográfica como de producto, que ha generado fuertes crecimientos de ventas. Actualmente el grupo gallego está presente en 14 comunidades autónomas españolas y participa también en los mercados de Portugal y Marruecos.
La cartera de suelo de la compañía de la familia Jove a finales de diciembre alcanzaba los 9,1 millones de metros cuadrados edificables, por lo que cuenta con una de las mayores reservas de suelo urbanizable del país.
Con respecto a las previsiones para 2003, la cifra de negocios estimada por Fadesa para el próximo ejercicio se sitúa en 520 millones de euros, aproximadamente. La inversión que tiene planeada el grupo gira en torno a los 650 millones de euros, que irán destinados, en gran medida, a continuar con la expansión geográfica y la diversificación de productos incluidos en la división inmobiliaria.
El área patrimonial tiene registrados numerosos proyectos en ejecución y se espera que, a finales de 2003, comiencen a suponer una aportación más importante a la facturación total de la compañía.
También es destacable el desarrollo de la división industrial, que contribuye principalmente mediante su filial Diana Forest con la política de diversificación de negocio y de presencia internacional.