Gema Fernández
La ciudad de los rascacielos resucita

Nueva York seguirá siendo "La ciudad de los rascacielos". Los siete diseños seleccionados como posibles opciones para reconstruir la "zona cero" apuestan por la verticalidad. Arquitectos como Norman Foster, Rafael Viñoly o Alejandro Zaera-Polo, han curado el vértigo que padecían los neoyorquinos. El anuncio de la muerte de los rascacielos en Nueva York tras los atentados del 11 de septiembre de 2001 resultó prematuro, a juzgar por los siete diseños seleccionados para renovar la imagen de la "zona cero". Las anteriores propuestas apostaban por volúmenes horizontales, resultado de una sociedad enferma de vértigo. Pero, al parecer, todos los males de los neoyorquinos se han curado.
Seis equipos elegidos entre más de cuatrocientas propuestas recibidas de todo el mundo, además de otra firma escogida por la Corporación para el Desarrollo del Bajo Manhattan (LMDC) -empresa pública encargada de la selección de los proyectos-, han ofrecido ideas arquitectónicas y urbanísticas para una zona de 6,4 hectáreas de extensión, en la que se asentaban las famosas Torres Gemelas.
Los nuevos diseños "tienen una diversidad de figuras geométricas deslumbrante, desde formas de edificios convencionales hasta estructuras muy poco ortodoxas", explica John Whitehead, presidente de la LMDC.
Varias de las propuestas para reconstruir el lugar incluyen estructuras no sólo más altas que el viejo World Trade Center, sino también más altas que las Torres Petronas de Kuala Lumpur, las más altas del mundo, con 452 metros.
El arquitecto berlinés Daniel Libeskind apuesta por un "jardín vertical", una aguja de cristal de más de 540 metros de longitud llena de zonas verdes que propone construir junto a otro rascacielos de usos comerciales y culturales, todo ello alrededor de una gran plaza asentada sobre la base de la "zona cero" actual y a la que se desciende por escaleras que parten desde un museo, que sería la entrada obligatoria al complejo.
El británico Norman Foster y su equipo, propone dos enormes torres gemelas de cristal -ambas más altas que las Torres Petronas de Malasia-, que estarían unidas en varios puntos y recorridas verticalmente por un servicio de funicular.
United Architect, una coalición de seis firmas arquitectónicas encabezadas por el español Alejandro Zaera-Polo contempla la construcción de cinco torres de acristaladas de diferente envergadura, entre las que destaca una central más alta que cualquier otro rascacielos, y que irían unidas hacia el piso sexagésimo por una gran avenida interior, con locales comerciales y culturales a cada lado.
El arquitecto español ha indicado que esta concepción pretende que las cinco torres se configuren "como si fueran un bosque ritual, en el que unos edificios se apoyan en otros".
Todos los participantes han respetado las "huellas" de las dos torres caídas, tal y como se pedía en las bases del concurso, ya que esos terrenos se dedicarán al recuerdo de las casi 3.000 víctimas del atentado y sobre cuyo diseño se abrirá un concurso este año. Foster