Fomento plantea inaugurar el AVE a Lleida a una velocidad de 250 kilómetros

El titular del Departamento, Francisco Alvarez-Cascos, reiteró hoy que prevé fijar la fecha de puesta en servicio del que será segundo Ave de España a lo largo de enero, un mes después del objetivo oficial, una vez que el Gestor de Infraestructuras Ferroviarias (GIF) y Renfe garanticen la operatividad el sistema de seguridad y señalizaciones ERMTS de la línea, actualmente en fase de pruebas.

No obstante, el ministro apuntó que "Fomento se plantea poner en servicio el Ave a Lleida con las instalaciones de seguridad y señalización ferroviarias convencionales (el sistema ASFA), si las nuevas (ERTMS) plantean dificultades".

Según Alvarez-Cascos, ambos sistemas presentan "iguales garantías de seguridad, pero a distinta velocidad", ya que el convencional (ASFA) sólo permite a los trenes circular a una velocidad máxima de 250 kilómetros a la hora, mientras que el ERTMS es el que posibilita alcanzar la velocidad punta de 350 kilómetros a la hora programada para la línea.

De esta forma, el Ave a Lleida no podrá cumplir en un primer momento los objetivos de tiempo de viaje con que fue diseñado, que prevén que el trayecto entre Madrid y Zaragoza se realice en una hora y 15 minutos y se invierta una hora y 55 minutos en la conexión con Lleida. No obstante, el titular de Fomento aseguró que dichas modificaciones en el servicio se reflejarán en el precio de los billetes que, según explicó, no alcanzarán su importe máximo hasta que no estén en servicio a finales de 2004 los trenes de Alta Velocidad y Altas Prestaciones que suministrarán Siemens y Talgo. El ferrocarril continuará siendo así protagonista de las actuaciones del Ministerio de Fomento en 2003, ya que además de presidir su primera inauguración de una línea Ave, Alvarez-Cascos deberá consensuar la Ley Ferroviaria, que articulará la desaparición del monopolio de Renfe y la apertura a la libre competencia de este modo de transporte.

Alvarez-Cascos, durante la presentación del balance de actuaciones de se Departamento en 2002, detalló su previsión de lograr la aprobación en el Congreso de dicha ley a lo largo del año, para poder empezar a acometer a finales de 2003 o comienzos de 2004 las reformas estructurales que conlleva.
En este sentido, recordó que la entrada en vigor de la ley supondrá la inmediata liberalización del transporte de mercancías en tren, además de la segregación de Renfe de la parte de gestión de infraestructuras que, junto con las que dependen del GIF, pasarán a integrar el futuro Administración de Infraestructuras Ferroviarias (ADIF).

Este nuevo ente público se encargará, según relató el ministro, de establecer surcos de vía y otorgarles en concesión a Renfe y los operadores ferroviarios que con ella compitan, previo pago del correspondiente canon o peaje.

Alvarez-Cascos destacó también que otro gran objetivo de Fomento para el nuevo año es la consecución con las comunidades autónomas de un Pacto de Suelo que permita atajar el encarecimiento del precio de la vivienda libre.
El ministro expresó su deseo de que dicho consenso se produzca en la Conferencia Sectorial que con tal objetivo está convocada para el próximo 22 de enero.

Respecto a las actuaciones de 2002, Fomento licitó obras de distintas infraestructuras de transporte por un importe total de 18.753,8 millones de euros, principalmente destinados a autovías, autopistas y líneas ferroviarias de Alta Velocidad.

En concreto, el Departamento que dirige Alvarez-Cascos puso en marcha las obras de 2.080,5 kilómetros de vías de alta capacidad con una inversión de 9.821 millones de euros, además de poner en servicio 338,1 kilómetros de red (de los que 134,9 kilómetros son autopistas).

En cuanto a la construcción de los nuevos corredores Ave, Fomento licitó obras en 1.312,7 kilómetros, presupuestadas en un total de 6.868 millones de euros, mientras que entre la actuación en las líneas férreas convencionales estaca la supresión de 216 pasos a nivel y se pusieron en marcha la desaparición de otros 1.806.

Aeropuertos Españoles y Navegación Aérea (Aena), por su parte, inició obras en distintos aeródromos por 1.489,9 millones, mientras que la inversión destinada a instalaciones portuarias ascendió a 574 millones.

Por último, Alvarez-Cascos, destacó la puesta en marcha del nuevo Plan Vivienda 2002-2005 y las 79.719 actuaciones de vivienda protegida financiadas en el marco de su primera anualidad, y los 212,58 millones invertidos por Correos y Telégrafos, principalmente destinados a mejorar sus instalaciones y automatizar la gestión de los envíos para reducir los plazos de entrega.