Conexión transeuropea
lunes 20 de octubre de 2014, 14:42h
El segundo cinturón de San Sebastián, además de descongestionar los accesos a la ciudad y facilitar las conexiones internas de Guipúzcoa, agilizará el tráfico internacional, que experimenta actualmente un incremento anual del 10%. Tal y como han apuntado algunos responsables forales, esta carretera, junto a la autovía de Navarra y la Eibar-Vitoria, completará la trilogía que permitirá una mejor conexión entre la península y el resto de Europa.
La nueva vía supone un gran esfuerzo económico, 220 millones de euros, y también técnico, ya que los dieciséis kilómetros del trazado contarán con cuatro túneles y 33 viaductos, uno de ellos, que salva la vega del Urumea, de un kilómetro de largo. Los responsables de la Diputación guipuzcoana han querido recalcar en todo momento, el especial respeto por el medio ambiente que se ha guardado en este trazado, con la incorporación de medidas correctoras para aminorar los ruidos en las zonas pobladas.
El segundo cinturón formará parte de la autopista Bilbao-Behobia, por lo que será de peaje, aunque de momento se desconoce el precio final para los conductores.