Paraísos españoles para los jubilados europeos
lunes 20 de octubre de 2014, 14:42h
Los senior resort empiezan a aparecer en las costas españolas. Este producto inmobiliario se ha desarrollado en Florida, donde está ya muy consolidado, y ha llegado a España gracias al interés que muestran británicos, alemanes, holandeses y escandinavos por pasar sus años de jubilación en lugares tranquilos, rodeados por un medio ambiente agradable y con un clima mediterráneo.
El concepto de senior resort, o complejos residenciales para mayores de 55 años, surge en Florida, donde está actualmente muy evolucionado. Se trata de proyectos turísticos residenciales que en principio hacen las funciones de segunda residencia pero cuya finalidad es ser la primera residencia cuando llegue el momento de jubilarse. Están ubicados básicamente en las costas y los demandantes son, prácticamente en exclusiva, británicos, alemanes y del norte de Europa.
La oferta de senior resort en España es, hoy en día, muy limitada, y se encuentra casi en su totalidad en fase de desarrollo. Según el informe sobre este tipo de productos realizado por la consultora Irea e incluido en el último número del Análisis del Mercado Inmobiliario, el incremento de la esperanza de vida libre de discapacidades y con buena salud ha derivado en un retraso en el ingreso de los mayores en residencias, “existiendo una tendencia hacia el desarrollo de nuevos productos que van más alla de las tradicionales residencias de la tercera edad, como los denominados senior resorts”.
A pesar de la dispersión en cuanto al diseño y definición del producto, hay una serie de tendencias generales y elementos comunes entre los proyectos que actualmente están en desarrollo. En primer lugar, en el régimen de explotación de las viviendas predominan las fórmulas de venta, sujeta generalmente a la condición de que el disfrute del inmueble corresponda a personas mayores de 55 años. Por otro lado, cabe destacar la existencia de diversos tipos de alquiler, entre los que se encuentran las formas clásicas, con una alta rotación de inquilinos, y modalidades de alquiler vitalicio, similares a las de venta, y que consisten en la cesión del uso vitalicio de las viviendas.
De cara a una posible venta del conjunto en el futuro, la modalidad de alquiler vitalicio lleva implícita una menor recurrencia de ingresos anuales, lo que “constituye un factor limitador en inversores interesados, como fondos de inversión o inmobiliarios, condicionando, por tanto, la liquidez del producto”, según explica David Fernández de Castro, consultor de la división de hoteles de Irea. Es destacable que en proyectos sin financiación destinados al alquiler las tasas de rentabilidad están situadas entre el 14% y el 15%, mientras que en los destinados a la venta de usufructo vitalicio es 5 puntos más alta, aproximadamente, y en los de venta se sitúa entre el 15% y el 17%.
El tipo de inmueble es predominantemente apartamento en bloque y las instalaciones comunes suelen consistir en un edificio principal, que incluye departamentos básicos, como centro médico, áreas socio culturales, restaurantes, gimnasio, zona comercial e instalaciones de spa. Entre las zonas deportivas que suelen incluir, destaca su adaptación al tipo de actividad que pueden realizar las personas mayores, como petanca o paseos, entre otras. La mayoría de los complejos disponen también de una residencia para mayores no válidos, para que no tengan que dejar el resort en el caso de que ya no pudieran valerse por sí mismos.
En cuanto a las perspectivas de futuro de este nuevo mercado, hay un factor que se debe tener en cuenta: la aparición de nuevos destinos turísticos en el arco mediterráneo, como Bulgaria, Croacia, Grecia y Turquía. Aún así, a pesar de que las condiciones climáticas y medioambientales son similares a las de España, por el momento no disponen de la misma estabilidad económica, social y política y no atraen, por tanto, en la misma medida ni a inversores ni a promotores ni a compradores.
Actualmente existen, o bien en desarrollo o ya en marcha, varios senior resorts en España, la mayoría de ellos situados en la Costa Blanca, como el Santa Pola Senior Resort, Alfaz del Sol, Forum Mare Nostrum o Ciudad Patricia, en la Costa del Sol, como Sol Andalusí o Vitania Residencial, y, de manera aislada, en otras localizaciones como Castellón o Santander.