¿Habrá absolución para IU?

Ildefonso Fernández, instructor del “caso” como secretario de Organización, fue quien articuló, vía informe, la absolución del “enjuiciado”, al considerar que éste había pagado política (dejó de ser portavoz del grupo) y económicamente (abonó el importe del viaje de su acompañante) su pequeña veleidad.

Punto y final para una historia que supuso la ruptura definitiva entre Fernández y Reneses, y que dio pie a la primera demostración de cómo se podían desenvolver los distintos sectores que conforman la coalición madrileña de cara al cónclave regional que se celebrará a mediados de octubre.

Absolución mayoritaria, por tanto, para Reneses, aunque con el voto desfavorable del núcleo más próximo al coordinador regional, entre ellos, Monserrat Muñoz, José Masa y Julio Setién. Fausto Fernández perdió la votación (curiosamente dirigida por Ildefonso Fernández, en otro tiempo apoyo del líder de IU-CM, pero hoy en la órbita de Gerardo del Val, cabeza visible de Espacio Alternativo, y Moral Santín) y tuvo ocasión de visualizar, una vez más, el poder numérico de los adversarios que pretenden cerrarle el paso hacia la coordinación.

Si los acontecimientos en el cónclave regional se desarrollan como pretenden las corrientes de Angel Pérez, Juan Ramón Sanz (PCE), Reneses y Susana López (Plataforma de Izquierdas), Fernández se verá apartado del liderazgo de la coalición y de la portavocía del grupo, cargos que podrían recaer en el diputado Fernando Marín. Una situación que tiene mucho de transitoria, dada la edad del dirigente, pero que, sin duda, permite a Pérez volver a tener las riendas de la organización, aunque sea por persona interpuesta.

Cambios políticos y organizativos que los integrantes de esta alianza pretenden proyectar en la asamblea general. Un cónclave en el que la permanencia de Gaspar Llamazares como coordinador general está también comprometida. Se han puesto varios nombres sobre la mesa para sustituir al actual líder de la coalición, entre ellos, el de Angel Pérez, aunque muchos dudan de que el veterano dirigente madrileño dé finalmente el paso para tomar las riendas de Izquierda Unida.

Gana, sin embargo, adeptos la opción de Enrique Santiago, actual secretario general del Comité Español de Ayuda al Refugiado (CEAR), una alternativa surgida a instancias de las Juventudes Comunistas e Independientes de IU, que en el territorio madrileño es vista con buenos ojos por el PCE, y dirigente de la corriente mayoritaria. Los valedores de esta candidatura mantienen también contactos con el ala más ortodoxa de esta formación, Plataforma de Izquierdas y los integrantes de Corriente Roja que todavía permanecen en la coalición tras la fuga de Nines Maestro, y cuyo apoyo se pretende captar con la promesa de una renovación profunda de la organización.