La contraportada
Gehry vuelve a ‘romper esquemas’
Mónica Figueres/ Barcelona
lunes 20 de octubre de 2014, 14:42h
Los edificios que ha diseñado Frank Gehry para el barrio barcelonés de La Sagrera, modernos, ecológicos y desestructurados, han sido uno de los mayores puntos de interés de la exposición ‘Barcelona in progress’. El proyecto es el resultado de varios años de trabajo y se ha convertido en el orgullo del arquitecto canadiense.
El desarrollo urbanístico y la renovación arquitectónica de Barcelona no ha terminado con el Fórum de las Culturas. Más bien, las instalaciones construidas para albergar este evento internacional son sólo el principio de una serie de importantes actuaciones en la Ciudad Condal. La exposición ‘Barcelona in progress’, ubicada en el Edificio Fórum, muestra los proyectos que se llevarán a cabo en la capital catalana, entre los que destaca el edificio “torcido” diseñado por Frank Gehry.
El arquitecto canadiense lleva varios años trabajando en este proyecto, ya que, desde la primera vez que vió los terrenos en los que se construiría la nueva estación del tren de alta velocidad de La Sagrera, decidió que ése sería el lugar perfecto para su nueva creación desestructurada.
Gehry ha diseñado dos edificios diferentes en tamaño y forma, pero complementarios. La torre de oficinas, que será más visible debido a su altura, tendrá 80.000 metros cuadrados de superficie. Será una construcción en forma escalonada que alcanzará los 145 metros de altura y se caracterizará por una gran cantidad de aristas y de formas irregulares. Además de lo llamativo de sus formas, el inmueble será, sobre todo, un experimento en cuanto al aprovechamiento de energía.
Las fachadas, que tendrán como elementos básicos el aluminio y el cristal, serán diferentes en función de su orientación, y la temperatura del edificio se mantendrá gracias a un sistema para obtener energía geotérmica del subsuelo.
El otro componente de este singular conjunto arquitectónico estará destinado a un centro de reflexión sobre la movilidad. Su cubierta estará llena de curvas para imitar las formas “del velo de una novia”, como ha destacado Gehry, y tendrá instaladas una serie de placas fotovoltaicas. El denominado Centro Interdisplinado de Movilidad está diseñado a modo de hangar y tendrá una superficie de 7.000 metros cuadrados.
Lo que más destaca del proyecto del famoso arquitecto canadiense es que, sin duda, se ha ‘recreado’ en una obra que considera muy importante. Tanto al presentar su maqueta como al hablar de cómo quedarán los edificios y el significado que tiene cada detalle, Gehry no oculta su emoción y su especial interés por el complejo de La Sagrera. Y no es de extrañar que haya puesto todo su empeño en este diseño, ya que el arquitecto siempre ha destacado a Europa frente a Estados Unidos en lo que se refiere a innovación en edificios sostenibles, y a la hora de elegir sus dos ciudades favoritas no duda en contestar que son Chicago y Barcelona, donde ya dejó su huella en 1992.