Conde casará a su hija por todo lo alto en la finca de los Carrizos

El novio, Fernando, es hijo de otro multimillonario también tocado por los escándalos financieros, Manuel Guasch, que fue presidente de Renault y Ebro, cuando el grupo Kio controlaba la primera empresa agrícola del país. Los novios han invitado a más de mil personas de la alta sociedad, entre los que destacan el cantante Enrique Iglesias y su novia, la tenista Ana Kournikova.

El titular del Juzgado Central de Vigilancia Penitenciaria, Javier Gómez Redondo, estudia en estos momentos la petición que le han hecho los abogados de Conde para que éste pueda asistir a la boda. Hasta el momento, le ha ido denegando todos los meses desde principios de año las solicitudes de permisos ordinarios, alegando que no ha cumplido la mitad de la condena y que, además, no ha satisfecho los 2.500 millones de pesetas que impuso la Audiencia Nacional, y ratificó el Supremo, a la cúpula del Banesto como responsabilidad civil subsidiaria.

Mario Conde, según fuentes próximas al banquero, lleva varios meses, desde la cárcel de Meco, tratando de negociar con Banesto el pago de los 2.500 millones, pero “cada vez que hay posibilidad de acuerdo, se cortocircuita”, manifiestan dichas fuentes.

Ignacio Peláez, abogado de Conde para los temas carcelarios, tiene interpuesto un recurso ante la Audiencia Nacional para tratar de conseguir que se le computen las redenciones extraordinarias de su primera etapa en prisión, y que, de conseguirlo, le significaría haber cumplido la mitad de la condena y, así, poder acceder a la libertad condicional, siempre que hubiera pagado la responsabilidad civil.

El año pasado, cuando se comenzó a hablar de la boda, la propia hija de Conde, Alejandra, aclaró que no se iba a casar hasta que su padre saliera de la cárcel, lo que aplazaba la ceremonia de hecho hasta el año 2007, que es cuando los abogados creen que el financiero podría conseguir legalmente la libertad condicional. La boda, que estaba prevista inicialmente para junio del año pasado, se retrasó sine die cuando el Tribunal Supremo confirmó la pena de 20 años para Mario Conde.

Alejandra, que tiene ya 27 años, hizo la carrera de abogado, pero ha preferido siempre el mundo de los negocios, y se ocupa de los negocios familiares, y además, junto a su hermano Mario, de 30 años, lleva las fincas de Las Salcedas y Los Carrizos, las principales propiedades de la familia. El novio, Fernando Guasch, trabaja en el sector financiero