El teatro Arango de Gijón se convertirá en una clínica de Corporación Dermoestética

El teatro dejó de funcionar en 1999 y, a pesar de los intentos de Manuel Fernández Arango, propietario del 22%, por volver a ponerlo en funcionamiento, no fue posible conseguir la financiación necesaria para adaptar el edificio a la normativa sobre seguridad.

En este contexto, Corporación Dermoestética llegó a un acuerdo con los propietarios del cine para readaptarlo de forma parcial y darle nuevos usos, algo que está permitido, siempre que se respeten sus elementos fundamentales.

El anteproyecto presentado hace algunos meses por la compañía ha recibido la aprobación del Principado, aunque con varias matizaciones. En primer lugar, el inmueble deberá conservar un elemento decorativo que tienen los palcos del patio de butacas. Además, las salas de espera, que estarán muy cerca del actual escenario, deberán tener el techo acristalado de manera que se pueda ver, desde el interior, la parte superior del teatro.

También se hace mención especial a la necesidad de respetar “al máximo los elementos decorativos existentes, tanto interiores como exteriores. En el exterior, en la fachada de la calle de la Merced, deberá mantenerse el trazado de carpintería, pudiendo insertar en muros o vidrios el anagrama y marca de la empresa”.

Los plazos de ejecución todavía no están fijados, ya que dependen del proyecto definitivo, que aún no se ha presentado. Lo que sí está previsto es que los trabajos de obras menores y limpieza empiecen lo antes posible, de manera que la clínica pueda abrir a finales de este año o principios de 2005.