La Comisión Europea no termina por dar el visto bueno al proyecto
SEO/BirdLife considera que el informe de la Comisión Europea es crucial para detener la financiación del trasvase del Ebro
lunes 20 de octubre de 2014, 14:42h
Desde hace más de tres años años, la Comisión Europea está reclamando al Gobierno español estudios y datos para poder valorar si el Plan Hidrológico Nacional y su mayor obra, el trasvase del Ebro, cumplen con la normativa comunitaria en materia ambiental.
Sin embargo, las aclaraciones del Ministerio de Medio Ambiente no satisfacen estas demandas ya que el informe que la Dirección General de Medio Ambiente de la Comisión Europea ha remitido a la Dirección General de Política Regional (que debe autorizar la financiación) no termina por dar el visto bueno al proyecto de trasvase del Ebro.
El informe, conocido desde el pasado sábado día 6 de marzo a través de varios medios de comunicación, señala que no se puede asegurar la viabilidad ambiental y económica del trasvase, y desaconseja su financiación con cargo a los fondos europeos. SEO/BirdLife ha sido una de la asociaciones conservacionistas que ha presentado informes y alegaciones en contra de este proyecto y considera que este último informe de la Directora General de Medio Ambiente de la Comisión Europea es absolutamente coherente con la política medioambiental de la Unión Europea. No se trata de un informe definitivo, pero su contenido es muy contundente y las dudas e indefiniciones que plantea serán difíciles de solventar por parte del Ministerio de Medio Ambiente.
El trasvase del Ebro es un proyecto faraónico que tendrá graves repercusiones ambientales y sociales, tanto en la cuenca donante como en las cuencas receptoras. El Gobierno ha convertido su puesta en marcha en una cuestión de Estado, a pesar de la imposibilidad física de realizarlo a medio plazo por falta de recursos hídricos a trasvasar y por su inviabilidad económica. Es hora ya de dejar paso a una gestión del agua basada en la contención de la demanda. Hay que poner en marcha una nueva cultura del agua, basada en el ahorro y en la reducción del consumo.
El Plan Hidrológico Nacional insiste en una política hidráulica basada en el impulso de la oferta, optando masivamente por unas infraestructuras que pretenden multiplicar un recurso en realidad cada vez más escaso. Lejos de prepararnos para una drástica reducción en la disponibilidad del agua a consecuencia del cambio climático, se mantiene un modelo de gestión insostenible que genera una demanda galopante y descontrolada.
SEO/BirdLife solicita una vez más al Gobierno español que derogue el Plan Hidrológico Nacional y que descarte definitivamente la construcción de grandes embalses y trasvases y ponga en marcha un modelo de gestión hidrológico más eficiente.