El Ejecutivo invita a la sociedad vasca a mostrar su desacuerdo
La UE excluye el eje ferroviario Madrid-Vitoria-Dax de sus prioridades
lunes 20 de octubre de 2014, 14:42h
El Gobierno vasco va a remitir a la Comisión Europea un texto en el que exige que el eje ferroviario Madrid-Vitoria-Dax, en el cual se incluye la Nueva Red Ferroviaria Vasca, "no sea excluido" de la lista de proyectos prioritarios de las redes transeuropeas de transporte. Según la Administración regional, la "no construcción" de esta infraestructura "provocaría un retraso de 50 años en el desarrollo socio-cultural y económico de la sociedad vasca".
Garbiñe Esteban
Bilbao
El texto de protesta del Gobierno vasco se remitirá al presidente de la Comisión Europea, Romano Prodi, a la vicepresidenta de la Comisión y Comisaria de Transportes y Energía, Loyola de Palacio, al presidente del Gobierno central, José María Aznar y al presidente de la Comisión de Regiones Periférico Marítimas, Claudio Martini, según ha asegurado el consejero vasco de Transportes y Obras Públicas, Alvaro Amann.
La declaración aprobada recoge que "desde los Acuerdos de Essen, en el año 1994, la construcción de una red ferroviaria de alta velocidad que conectara la Península Ibérica con Europa y sirviera de eje vertebrador del Arco Atlántico ha sido considerada por la Unión Europea un proyecto de la máxima prioridad". Sin embargo, según añade, recientemente la Comisión Europea ha presentado dentro de la llamada Iniciativa de Crecimiento la lista de proyectos de ejecución inmediata quick start list (lista de proyectos de ejecución inmediata) y "ha excluido el eje ferroviario Madrid- Vitoria-Dax, en el cual se incluye la Nueva Red Ferroviaria Vasca".
A juicio del Ejecutivo vasco, "esta exclusión no es entendible porque quiebra con un criterio asentado en la cultura europea del transporte sobre la necesidad de garantizar el equilibrio territorial privilegiando las infraestructuras que conectan la periferia europea con los centros más dinámicos de la actividad económica, siendo el eslabón transpirenaico de Irún-Hendaia un elemento clave".
Según argumenta Amann, "no se justifica esta exclusión" porque la Nueva Red Ferroviaria Vasca "cumple" los cuatro requisitos que la Comisión Europea ha establecido para los proyectos que integren la quick start list, y que, consisten "en madurez, en el sentido de poder comenzar en el plazo de los próximos tres años, dimensión transfronteriza, impacto en el crecimiento y la innovación y efectos medioambientales positivos".
Por ello, el Ejecutivo de Ibarretxe manifiesta que la decisión de la Comisión Europea produce "preocupación y alarma" porque, "el hecho de que a fecha 1 de octubre de 2003 el proyecto de eje ferroviario Madrid-Vitoria-Dax formaba parte de la 'Lista 0' de proyectos prioritarios, conforme al informe definitivo del Grupo de Alto Nivel Van Miert para la Red Transeuropea de transporte, induce a pensar que su posterior exclusión responda a iniciativas o propuestas cuanto menos, arbitrarias".
Acto seguido, advierte de que la "no construcción" de la Nueva Red Ferroviaria Vasca y su exclusión como eje transeuropeo "provocaría un retraso de 50 años en el desarrollo social-cultural y económico de la sociedad vasca, así como la marginación definitiva de la Euroregión Arco Atlántica".
Por todo ello, el Gobierno vasco, a través de la citada declaración, hace una llamada a "la implicación de todas las instituciones vascas, partidos políticos, sindicatos, asociaciones empresariales y a la sociedad en su conjunto", porque, según destaca, "esto nos afecta a todos los que trabajamos y vivimos en el País Vasco".
El Ejecutivo de Ibarretxe apuesta por trasladar a las autoridades españolas, a la comisaria de Transportes y Energía, Loyola de Palacio, y a la propia Comisión Europea que "la sociedad vasca no entiende ni puede aceptar que se excluya la Nueva Red Ferroviaria Vasca de la quick start list, por sus repercusiones negativas e irreversibles para el desarrollo económico social y cultural de Euskadi y de la Euroregión del Arco Atlántico".
El portavoz del Gobierno vasco, Josu Jon Imaz, por su parte, ha dicho que le gustaría que el Ejecutivo regional tuviera presencia en las instituciones europeas en materia de infraestructuras "para tener la garantía de que efectivamente alguien estaba trabajando a favor de este proyecto y que no estaba manteniendo como mínimo posiciones pasivas, sino, de obstaculización".