la semana/Jesús García y Francisco Tena
El temor a actos terroristas atenaza a los inversores
lunes 20 de octubre de 2014, 14:42h
Tras dos semanas de optimismo consecutivas, que consiguieron alzar a los índices de renta variable prácticamente hasta los máximos anuales, el temor a nuevos atentados terroristas volvió a sembrar los mercados de números rojos, durante esta tercera semana del mes de noviembre.
Si a este renacimiento del temor a los actos terroristas le añadimos la alta rentabilidad obtenida por una gran parte de los títulos de renta variable durante este año, los inversores han encontrado la excusa perfecta que necesitaban desde hace un par de meses para convencerse de que había que vender, y eso es lo que han hecho.
En estas circunstancias de no excesiva seguridad, el Ibex-35, principal indicador nacional, acabó la semana (del 10 al 17 de noviembre) situado en los 7.135,7 puntos, lo que le ha supuesto perder un 1,21% con respecto a la anterior.
El índice general de la construcción, por su parte, volvió a actuar como refugio en tiempos de incertidumbre, y consiguió acabar en los 1.245,31 puntos, ganando así un escaso, pero importante, 0,31%.
Durante la semana, supimos por boca del Banco de España que, entre junio pasado y el mismo mes de 2002, el volumen de hipotecas creció un 22,5%, lo que ha llevado a Jaime Caruana a aconsejar prudencia a las entidades financieras, ante el riesgo de que aumente la morosidad sustancialmente en el medio plazo.
Según los datos del Banco de España, en los seis primeros meses del año se observó una ligera moderación en el ritmo de expansión de la financiación para la compra de vivienda, aunque al tiempo se produjo una aceleración del crédito concedido para la construcción y promoción inmobiliaria, que aumentó un 30%. Parece claro, una vez más, que el sector constructor continúa viento en popa.
Por lo que respecta a las empresas del sector, los rumores vuelven a hacer acto de presencia en los parqués, tras una época de relativa tranquilidad. En esta ocasión, la implicada es FCC, en la persona de Esther Koplowitz, que controla una participación del 27% en la empresa española de construcción, y que, parece ser, ha ofrecido recomprar la participación del 26% que controla la compañía francesa Veolia Environnement en la constructora.
Por otro lado, ACS y Dragados anunciaron que prevén cerrar su fusión en un plazo de entre quince y veinte días. En la actualidad, las dos constructoras aguardan a que la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) apruebe el folleto de la ampliación de capital de 81,60 millones de ACS con que la empresa que preside Florentino Pérez cubrirá el intercambio de acciones.