El objetivo es alcanzar los 13.000 Mw en 2010
lunes 20 de octubre de 2014, 14:42h
La estimación más importante del capítulo referido a la energía eólica del Plan de Fomento de las Energías Renovables es que hacia el año 2010 puede existir en España una potencia instalada total de unos 13.000 Mw.
El Plan afirma la calidad de los productos suministrados por los fabricantes españoles, que son comparables a los más avanzados a nivel internacional, y, de igual modo, espera que durante los años que dura el proyecto se optimicen los diseños de las máquinas haciéndolas más eficientes.
A pesar de afirmar que existe un alto grado de compatibilidad entre las instalaciones eólicas y el respeto al medio ambiente, el documento señala que la ocupación del terreno en áreas de montaña de alto valor paisajístico o de conservación natural, el impacto visual y las construcción de parques en zonas con una altitud superior a los 1.500 metros sobre el nivel del mar, pueden afectar al medio ambiente. De cualquier forma, cada instalación debe ir precedida de un Estudio de Impacto Ambiental que analice los casos citados, así como el ruido mecánico o aerodinámico y los impactos sobre la fauna.
Los costes de inversión se ven afectados fundamentalmente por el precio de la línea y el equipamiento eléctrico necesario para la interconexión, que se señala como una barrera de entrada fundamental. Como ejemplo presupuestario considera un parque de 15 Mw de potencia nominal, construido con máquinas de 600 ó 700 Kw de potencia unitaria, con altura de buje de 45 metros, con una orografía normal y una línea de conexión de 10 kilómetros a 132 kilovoltios (kV), cuya inversión sería de 13 millones de euros.
Otras barreras a la inversión es la actitud de los distintos sectores, como el caso de las administraciones locales, tan importantes para el desarrollo de esta energía, que sienten que es un recurso que motiva inversiones apreciables, pero que no proporciona unos beneficios económicos adecuados.
Los incentivos a los promotores de energía eólica cuentan con un régimen especial apoyado por la Ley del Sector Eléctrico y que permite a los productores de electricidad con energía eólica y potencia inferior a 50 Mw incorporar su producción al sistema eléctrico sin someterse al sistema de ofertas, y la percepción de una prima sobre el precio de oferta cuyo objeto es la consecución de tasas de rentabilidad razonables.
La necesidad de competir en un mercado en el que la potencia unitaria de los aerogeneradores muy pronto pasará de los actuales 600 Kw a los 1.000 Kw, obliga a prestar ayudas de I+D a la industria nacional.
Las infraestructuras de evacuación de la energía eléctrica se co-financian, los cánones a los Ayuntamientos se desgravan del Impuesto de Sociedades y se proponen ayudas a la exportación, todo para conseguir el objetivo energético de 2010.