María Marín/ Consejera-directora general de Gesinar
"Afrontamos el futuro con mucha ilusión y con la fuerza que nos da la independencia"
lunes 20 de octubre de 2014, 14:42h

Gesinar afronta el futuro con optimismo después de tres años de idas y venidas y de cambios accionariales. El principal exponente de esa fortaleza proviene de la independencia que ahora preside las actividades de esta compañía, que comenzó siendo una especialista en subastas inmobiliarias de bienes procedentes de adjudicaciones bancarias y que ahora ha diversificado sus servicios para cubrir todo el abanico de prestaciones necesarias en la denominada ‘cadena de valor del ciclo inmobiliario’.
Gema Fernández
- Después de tres años llenos de movimiento, ¿cómo afronta Gesinar el futuro?
- Con muchas ganas e ilusión y con la fortaleza que nos da ahora el ser independientes, lo que nos permite abordar el mercado con más libertad y acceder a cualquier tipo de cliente. Después de la reestructuración somos más fuertes y estamos más preparados, por lo que el futuro se nos presenta muy interesante, sobre todo desde nuestra posición de empresa líder en el sector de consultoría inmobiliaria.
- ¿Qué han aprendido de la situación de cierta inestabilidad (por el cambio de accionista de referencia y la posterior venta) que han vivido en estos años?
- Lo primero que hemos aprendido es que hay que tener la estrategia empresarial muy clara y definida; y, si ésta funciona, lo que se demuestra con los resultados, seguir trabajando en esa misma línea, independientemente de la inestabilidad del entorno.
Además, hemos comprobado que, en situaciones de incertidumbre, la dirección debe transmitir tranquilidad al equipo y confianza en el futuro para que el trabajo se siga desarrollando con normalidad.
- ¿Qué supone para la empresa el hecho de que un grupo de los propios trabajadores posea una parte del accionariado?
- Es lógico creer que cuando un grupo de trabajadores tiene acciones de la compañía se implica más en el proyecto. Sin embargo, esa cultura de implicación ya existía en Gesinar antes de que el equipo de dirección entrase a formar parte del accionariado. Esta situación nos ha ayudado a conseguir que el núcleo directivo esté mucho más cohesionado.
- ¿Ha supuesto muchos cambios el pasar del apoyo accionarial de un gran banco al de una sociedad de capital riesgo como 3i?
- Además de conseguir la independencia a nivel de gestión de la compañía, algo que creo fundamental para el negocio, las cosas siguen prácticamente igual, porque mantenemos la misma autonomía que teníamos con Metrovacesa.
Eso sí, en el tema de resultados estamos menos protegidos ante las situaciones difíciles y ahora es mucho más importante que éstos sean buenos.
- El actual reparto accionarial, ¿podría variar más adelante?
- A corto plazo no creemos que haya cambios, y apostamos por la estabilidad accionarial, pero, en un futuro, nunca se sabe.
- Hasta hace poco, Gesinar era conocida por su posición de liderazgo en las subastas inmobiliarias y fueron pioneros en las subastas por Internet, ¿qué otras novedades pueden llegar en este campo?
- La novedad puede llegar por la incorporación de productos y clientes distintos a los clásicos. La subasta se ha convertido en un elemento de compra-venta transparente y eficaz y resulta muy atractivo para los promotores a la hora de vender restos de promociones de obra nueva, ya no sólo se emplean para los stocks bancarios de impagados.
- ¿Qué otras cosas han aportado las nuevas tecnologías al sector inmobiliario?
- De cara al cliente final, ahora existe mucha más información sobre las promociones. Y a nivel de gestión interna se ha mejorado mucho.
La última novedad son los mensajes cortos a través del teléfono móvil, que se emplean como herramienta de gestión entre los técnicos de la división de tasaciones hipotecarias, lo que les da más eficiencia y rapidez en su trabajo.
- Desde el año 2000 al ejercicio pasado han sido muchas los servicios que se han ido incorporando a la actividad normal de la compañía, ¿por qué este cambio?
- Nuestra estrategia se definió en el año 2000 y consistía en intentar aportar soluciones inmobiliarias en lo que denominamos ‘cadena de valor del ciclo inmobiliario’, empezando por el suelo y terminando por la propia prestación de servicios en edificios ya terminados. Dentro de esa estrategia, hemos ido desarrollando líneas de negocio que cumplían ese objetivo fundamental de servicio global, porque nos proporcionan nuevos clientes y nos ayudan a mantener los que ya tenemos.
- ¿Cuáles son los próximos pasos que va a dar la compañía en cuanto a expansión y diversificación?
- No nos planteamos iniciar nuevas actividades en los próximos dos años, sino que pretendemos consolidar las líneas de negocio que ya están en marcha, como subastas, tasaciones, inversión y gestión, obra nueva, etcétera. En cuanto a la expansión geográfica, se plantea, tanto a nivel nacional como internacional, a través de la red de franquicias con nuestro socio Coldwell Banker. Así, están previstas aperturas en Irlanda, Portugal y Grecia.
- En 2003, asistimos a varias compras y fusiones de compañías del sector. Si recibiesen una buena oferta, ¿Gesinar estaría dispuesta a formar parte de un gran grupo?
- Nuestro planteamiento inicial es continuar como hasta ahora, de forma independiente, para seguir creciendo.