Metrovacesa venderá en los próximos ocho meses activos por valor de 1.500 millones de euros

La inmobiliaria Metrovacesa ha vendido un edificio de oficinas de Madrid, ubicado en el Paseo de Recoletos 22. El inmueble, que alberga unas oficinas de Vodafone, ha alcanzado un importe cercano a los 25 millones de euros, según informaciones del mercado no confirmadas por la empresa. La operación es la avanzadilla de una serie de operaciones con las que los Sanahuja quieren reducir el endeudamiento neto de la empresa, aunque sea a costa de activos de calidad.

Esta estrategia, que responde al nombre de Plan Fénix, tuvo su primer logro en la venta de La Maquinista y Habaneras, en verano. Se trataba de dos centros comerciales muy consolidados, que reportaron a la empresa 450 millones de euros. Gracias a esta política de desinversiones, la firma de los Sanahuja ha logrado ingresar en medio año más de 500 millones de euros. Y aún espera ingresar por ventas de patrimonio otros1.500 millones antes de junio, según los objetivos del Plan Fénix.

Los próximos pasos podrían producirse en Madrid. Aunque la empresa evita pronunciarse al respecto, fuentes del mercado señalan que Metrovacesa tiene importantes activos en la capital. Entre los más jugosos están la sede central de Vodafone en Alcobendas, que adquirió hace tres años por 95 millones de euros, y la tienda de FNAC en Callao, cuyo valor podría estar en torno a los 80 millones. Otros activos que podrían estar cerca de venderse serían la sede de Versia y otro centro comercial.

Las maniobras de Metrovacesa reducen el peso español en la cartera de activos, en beneficio de Inglaterra, en donde la empresa tiene la sede del banco HSBC. La inmobiliaria controlada por la familia Sanahuja negocia actualmente con este banco la reestructuración del préstamo de 810 millones de libras (1.015 millones de euros) que la entidad le facilitó el pasado año para venderle su sede y posteriormente quedarse como inquilino. El plazo para la refinanciación acaba el 27 de noviembre.

También Francia gana peso en la cartera de Metrovacesa, ya que pasará a controlar 37 edificios en París, valorados en 2.000 millones de euros, en virtud del problemático proceso de segregación de Gecina.