Destinará el 41% de su inversión total en el periodo 2003-05 a objetivos ecológicos
Cementos Portland lanza un plan para reducir sus efectos ambientales
lunes 20 de octubre de 2014, 14:42h
Cementos Portland ha puesto en marcha un plan de inversiones medioambientales hasta 2005, que pretende acelerar la adaptación tecnológica de sus plantas cementeras a los futuros requisitos legales.
La compañía destinará el 41% de su inversión total en el periodo 2003-05 a objetivos ecológicos. El objetivo de las inversiones medioambientales de Cementos Portland es la adaptación tecnológica de las fábricas del grupo para adelantarse al cumplimiento de las futuras exigencias legales en materia de contaminación, que establece la Ley de Control y Prevención Integrados de la Contaminación -conocida por sus siglas en inglés IPPC-.
Cementos Portland tiene previsto realizar una inversión total de noventa millones de euros en el periodo 2003-05, de la que un 41% -37 millones de euros- tendrá finalidad medioambiental. La cementera obtuvo una facturación consolidada de 831,43 millones de euros en 2002. La empresa, integrada en el grupo Fomento de Construcciones y Contratas (FCC), tiene una plantilla de 2.816 empleados.
Permiso integrado
Pablo Espeso, director de Operaciones de Cementos Portland, explica que "el objetivo es tener finalizadas las inversiones el 31 de diciembre de 2005 para pedir la autorización ambiental integrada a principios de 2006 y adelantarnos así a la IPPC". Esta ley es aplicable a las instalaciones industriales a partir de octubre de 2007.
La autorización integrada es un permiso previsto en la IPPC. En la autorización se establecerán los objetivos de emisiones contaminantes previstos para cada planta industrial.
Cementos Portland prevé que la autorización requiera un plazo de diez meses, lo que le permitiría tener el permiso el 30 de octubre de 2006. "Además de adelantarnos a la IPPC, la adaptación tecnológica persigue un objetivo empresarial, ya que nos permitirá ganar competitividad", afirma Espeso.
Plan de inversiones
El plan de inversiones ecológicas se pondrá en marcha en las cuatro plantas cementeras del grupo: Alcalá de Guadaira (Sevilla), que invertirá 9,1 millones de euros; El Alto (Morata de Tajuña, Madrid), con 3,9 millones; Hontoria (Palencia), con 10,9 millones; y Olazagutía (Navarra), con 13 millones. Las plantas incorporarán las mejores técnicas disponibles previstas por la ley IPPC para el sector cementero.
La inversión ambiental de 37 millones de euros se destinará a la prevención y reducción de emisiones contaminantes y partículas a la atmósfera, así como a la minimización de ruidos, la mejora de la calidad de las aguas y el control de otros efectos ambientales.
La certificación ecológica de las plantas del grupo es otro de los objetivos ambientales. Hontoria y El Alto ya cuentan con la distinción ambiental ISO 14001. "Esperamos obtener la certificación para la planta de Navarra este mes y para Sevilla a finales de mayo", señala Espeso.
Cementos Portland cuenta con otras dos fábricas de cemento en España: una en Cantabria, perteneciente a Cementos Alfa, empresa en la que tiene una participación del 80%, y otra en Vizcaya, del Grupo Cementos Lemona, donde participa con un 29,9%.
En la actualidad, la única legislación aplicable a Cementos Portland está recogida en un decreto de 1975. "No hay ninguna otra legislación. Por ello, los cementeros nos planteamos en 1996, a través de la patronal Oficemen, la elaboración de un acuerdo voluntario con la Administración", explica Pablo Espeso.
El acuerdo prevé la reducción de las emisiones contaminantes por debajo de los límites legalmente exigidos. A nivel estatal, el acuerdo marco se firmó en 2001 con el Ministerio de Medio Ambiente. Posteriormente, las comunidades autónomas se han ido adhiriendo. De momento, el convenio se ha firmado en Asturias, Baleares, Cantabria, Cataluña y Castilla-La Mancha.
Próximamente, se suscribirá en Andalucía, Castilla y León y Madrid. Espeso señala que "actualmente, estamos en proceso de negociación con la Consejería de Medio Ambiente de la Comunidad de Madrid".
En este caso, la única planta cementera que existe en Madrid pertenece a Cementos Portland. Se trata de El Alto, situada en Morata de Tajuña. Por ello, es la compañía la que negocia directamente con la administración autonómica.
El convenio "será más restrictivo que el acuerdo marco", en cuanto a la reducción de emisiones de óxidos de nitrógeno, una sustancia muy dañina para la capa de ozono. El Alto, que acaba de conseguir la certificación medioambiental ISO 14001, ha sido uno de los principales objetivos de la inversión ecológica del grupo.
Cementos Portland invirtió en esta fábrica 14,3 millones de euros en el periodo 1996-2002. Para el periodo 2003-05, está prevista una inversión verde de casi cuatro millones de euros, el 74% del total previsto para esta fábrica.
Fuente: Expansión Directo