Rogers, Foster y Maki diseñan el futuro de Nueva York

El emblemático complejo que albergó las Torres Gemelas de Nueva York, que sucumbieron a la barbarie terrorista hace ahora cinco años, contará con un nuevo conjunto de edificios representativos con los que la ciudad pretende recuperar parte de lo perdido. Richard Rogers aseguró que espera que la gente acuda al lugar “para pensar en el pasado, pero también para soñar con el futuro”.
El arquitecto inglés es sólo uno de los encargados del diseño de los tres rascacielos que se construirán en la zona junto a la Torre de la Libertad ideada por Daniel Liebeskind. Junto a él se erigirán los edificios concebidos por su compatriota Norman Foster y por el japonés Fumihiko Maki. Se trata de tres torres que comenzarán a construirse el próximo año, y que estarán terminadas en 2012.
La primera de ellas, que lleva la impronta de Foster, contará con 78 pisos, y con una altura de 382 metros, similar a la de otro de los iconos de la ciudad, el Empire State Building. La “Torre 2”, que es como se llamará, estará coronada por cuatro diamantes inclinados hacia el área de jardines a nivel de calle, en la que se ubicará el Museo en recuerdo de las victimas de los atentados, y cuya inauguración está prevista para 2009. La “Torre 3”, obra de Richard Rogers, dispone de un esqueleto de acero con lingotes diagonales, que enmarcará la estructura de 71 pisos, que se levantará unos 352 metros sobre la superficie. Los primeros 17 pisos forman un podium de superficie comercial, sobre el que se elevarán el resto de plantas destinadas a oficinas. En último lugar, la “Torre 4” es un edificio minimalista que servirá de catalizador de la actividad del entorno urbanístico y contribuirá a la revitalización de la zona. A pesar de ser el más convencional de los tres edificios, cuenta con la peculiaridad de que su apariencia trapezoidal, se convierte en dos triángulos unidos, si se observa desde las alturas.
Los tres inmuebles han tenido en cuenta el diseño de Liebeskind y han creado un conjunto que configura una espiral descendente en altura, que obliga a dirigir la vista hacia el monumento que se construirá en el lugar que ocupaban las Torres Gemelas.

Pensando en las víctimas.- Está previsto que los tres modelos presentados sean sometidos a un proceso de enmiendas antes de que comience su construcción. En cualquier caso, el promotor Larry Silverstein, propietario del nuevo World Trade Center, se mostró orgulloso de haber contado con algunos de los mejores arquitectos del mundo para desarrollar este proyecto, cuyo coste estimado ronda los 4.500 millones de dólares (3.800 millones de euros). Se contempla la posibilidad de edificar una quinta torre, aunque todavía no se ha alcanzado un acuerdo al respecto.
Estos serán los actores que interpretarán el particular guión que escriban los habitantes del bajo Manhattan con su quehacer cotidiano. Con ellos, la Gran Manzana combatirá el dolor y alimentará el recuerdo de las cerca de tres mil personas que perdieron la vida el 11 de septiembre de 2001.