El sector creció un 4% en 2004 y representa el 18% del PIB

Diana Montero
Madrid

En 2004, la construcción ha vuelto a ser, un ejercicio más, el sector “más dinámico” de la economía española, convirtiéndose en el segundo mercado constructor más importante de la Unión Europea, según la patronal de las grandes constructoras, Seopan.

El año pasado se facturaron unos 144.700 millones de euros por esta actividad, lo que supone un crecimiento del 4% respecto a 2003, en línea con el incremento del 3,9% alcanzado entonces, y se crearon más de 100.000 nuevos puestos de trabajo, el 23% del total de empleos generados. Así, el sector constructor aporta ya más del 18% del total del Producto Interior Bruto (PIB), frente al 14% que generó hace una década.

La obra civil y la construcción residencial constituyeron uno de los principales motores de la actividad durante el ejercicio pasado, dado que representaron el 24% y el 33% de la facturación, respectivamente, un 6% y un 5% más que un año antes.

La otra fuente de negocio siguió siendo la obra pública. Los proyectos de administración, principalmente autonómica y local, generaron el 23% de la producción total, elevándose un 6%, frente al crecimiento del 4% experimentado por la demanda privada.

Andalucía, Castilla-La Mancha, Extremadura y Murcia son las regiones donde la construcción creció por encima de la media nacional. En la otra cara de la moneda se sitúan Baleares, Canarias y Castilla y León.

Seopan confía en que el sector crezca una media del 4% en 2005, si bien su presidente, Enrique Aldama, advierte que para conseguirlo es necesario que el Gobierno ponga “inmediatamente” en marcha los proyectos anunciados.