Administración cercana

Acercar la administración a los administrados es una de las grandes ventajas, y de las grandes exigencias, del Gobierno municipal. Esta nueva iniciativa debe ser acogida muy favorablemente. Pero echamos de menos otro tipo de oficina integral, dirigida a los servicios que el Ayuntamiento debe ofrecer a a los ciudadanos. El Samur y los servicios asistenciales de salud funcionan aceptablemente; en los casos de llamadas de denuncia de delitos la situación no es tan favorable, y comerciantes y ciudadanos en general se quejan de que cuando se denuncia un atraco, robo, o episodio de violencia, la Policía llega, en ocasiones, demasiado tarde.

Si descendemos a sucesos cotidianos menos trascendentes, pero muy molestos para los que los sufren: coches aparcados en doble fila,obstrucciones a la salida de los garajes, ruidos en el vecindario, fugas de agua, y un largo etcétera, la actuación municipal es más lenta.

Una solución podría ser la creación de una oficina permanente de atención al ciudadano, que ahora se realiza a través de distintos y no muy bien coordinados conductos, de forma que recibida la denuncia la propia oficina pusiera en marcha el dispositivo para hacer frente con prontitud a la situación. Es preciso reconocer que es un tema mucho más complejo y complicado que el de la recaudación de los tributos, pero sería del mayor interés para los ciudadanos. Por ello, la puesta en marcha de la oficina de atención integral al contribuyente debería ser sólo un paso hacia la atención integral al ciudadano, no sólo como contribuyente, sino como habitante de una gran ciudad cuyos problemas siguen creciendo.