OHL, Dragados y SyV compiten por la construcción del Salto Kennedy

Angel Valverde.

Santiago de Chile

Durante los últimos años, la inversión de las constructoras españolas en Latinoamérica ha centrado su actividad en el mercado chileno. OHL, Sacyr Vallehermoso, ACS, FCC y Abertis, entre otras, están desarrollando importantes proyectos en el país andino, especialmente en el sector de las concesiones.

El concurso convocado para la ejecución del Salto Kennedy, la última concesión urbana incluida en el programa del Ministerio de Obras Públicas, es una buena muestra de esta creciente actividad, ya que de los cuatro grandes grupos interesados en adjudicarse el proyecto, tres son españoles. A pesar de que la obra en cuestión no es de gran envergadura y está valorada sólo en 70 millones de dólares (unos 58,50 millones de euros), su concesión tiene un valor mucho más importante para cada una de las compañías que concurren al concurso, ya que todas ellas operan infraestructuras en la zona y ven el Salto Kennedy como un proyecto estratégico para completar sus actuales concesiones.

Sacyr Vallehermoso, con una inversión en autopistas urbanas e interurbanas en Chile de 1.800 millones de dólares (algo más de 1.504 millones de euros), quiere aprovechar esta licitación para utilizar de mejor forma la maquinaria y tecnología de la Radial Nororiente y en Vespucio Sur.

En el caso de Dragados y la alemana Hochtief, la concesión de esta infraestructura supondría acelerar los plazos en la construcción de otro de sus proyectos en la misma zona, y la incorporación de nuevos flujos de vehículos a la autopista.

La tercera aspirante es Costanera Norte, propiedad de la italiana Impregilo, que pretende crear un “empalme” de la actual carretera con el Salto Kennedy e incrementar el tráfico en las dos direcciones.

Aspirante aventajado.- La aspirante que dispone de mayor ventaja es OHL, que cuenta con 10 puntos porcentuales respecto a las demás ofertas. El grupo opera actualmente la Autopista del Sol y la Ruta Los Libertadores. Además, su filial Infraestructura 2000 fue la encargada de redactar el proyecto del Salto Kennedy para el Ministerio de Obras Públicas.

La fuerte presencia de la compañía presidida por Juan Miguel Villar Mir en Chile, donde posee el 22,8% de su cartera de construcción internacional, es el resultado de un importante plan de consolidación internacional. Una de las últimas actuaciones que OHL ha concluido en el país andino es el hospital de Alajuela, que fue inaugurado el pasado 24 de abril. Se trata del primer centro médico público chileno que cuenta con un sistema especializado para la esterilización de basura y de tratamiento de residuos y su desarrollo ha supuesto una inversión de 36 millones de dólares (casi 30 millones de euros). El grupo tiene previsto, además, llevar a cabo la construcción de otro hospital, que actualmente se está negociando con el Ministerio de Obras Públicas.

Según Villar Mir, que llegó a decir revisando los proyectos de la compañía durante los últimos años “ya soy muy chileno”, el interés de OHL en Chile reside en que “es un gran país y tiene la ventaja de tener una administración transparente y honesta; no hay el menor síntoma de corrupción. Es el país mejor administrado de toda Sudamérica, lo que hace que el riesgo de invertir allí sea mucho menor”.

Abertis, por su parte, acaba de entrar en el sector de aparcamientos en América Latina con la compra de cuatro estacionamientos en Santiago de Chile, que han supuesto a su filial Saba una inversión de 23 millones de euros. El plazo de la concesión es de 35 años e incluye la gestión de 1.584 plazas.

También FCC se ha adjudicado un contrato en Chile en los últimos días, que consiste en la recolección de residuos en un barrio de la capital. Para su puesta en marcha se requerirá una inversión de 2,10 millones de euros.