
Dentro de la Unión Europea, España es el país en el que el sector de la construcción tiene un mayor peso relativo en el mercado laboral. Las tasas de crecimiento han sido muy superiores a la media, lo que ha contribuido a la creación de más de 500.000 puestos de trabajo adicionales en el sector. Además, en el año 1995, la construcción aportaba el 9,6% a la ocupación total en España, mientras que 6 años después el porcentaje se elevó hasta el 11,7%. Según el informe elaborado por Procam, este dinamismo se ha debido al crecimiento del empleo, la creación de nuevos hogares, el aumento de la renta disponible y los bajos tipos de interés.