así se ve
lunes 20 de octubre de 2014, 14:42h
Un "loco pionero".
A los 21 años de edad, José L. Manzano comenzó a hacer sus primeros "pinitos" en el sector de las energías alternativas, por lo que se considera uno de los primeros "locos pioneros" que apostaron por este campo hace ya 25 años. Su "flirteo" con la energía solar acabó en un "matrimonio" duradero con Isofotón, una compañía que también apostó fuerte por el sol como fuente de energía y que se ha convertido en número uno de España y de Europa en este mercado.
Pasión por la naturaleza.
Manzano confiesa que le apasiona el campo y lo que más le relaja es descansar en una finca que posee en la zona de Aragón. También le gusta montar a caballo y jugar al tenis. Su otra gran pasión, y también la más importante, es su familia. Adora a sus hijos y procura pasar con ellos todo el tiempo que sus obligaciones laborales le permiten. Para apurar al máximo esos momentos confiesa que no suele ver la televisión y que se decanta por la música, sobre todo la étnica.
Insatisfecho.
Se define como "un insatisfecho de nacimiento" y considera que aún le queda todo por hacer en la vida, principalmente si se trata de "cosas útiles a la humanidad". Sin embargo, es una persona muy constante y "cabezota", como él mismo confiesa; su lema, el ya típico "el que la sigue, la consigue". Una filosofía que cuadra perfectamente con la de la compañía que dirige, que asegura que aún queda mucho por hacer en energía solar y considera que no hay nada imposible.
El sueño de una vida.
Ser recordado como una persona que hizo realidad su sueño; ése es el principal deseo de José L. Manzano para la posteridad. Y es que el equipo de Isofotón ha participado en la creación de una realidad que ha partido de una tesis doctoral. Una realidad con proyección de futuro y con miles de aplicaciones prácticas en el mundo en el que vivimos hoy en día. El orgullo de este directivo es saber que está contribuyendo "a la herencia de un mundo mejor para nuestro hijos".