Redaccion | Lunes 20 de octubre de 2014
El primer tramo del gasoducto que unirá Argelia y España ha sido adjudicado al grupo ACS, en consorcio con una constructora argelina. El contrato supone la construcción de una tubería de acero, de 300 kilómetros de longitud, que llevará el gas hasta la localidad de Sougueur.
La constructora que preside Florentino Pérez se ha adjudicado la construcción del primer tramo del gasoducto que unirá Argelia con España, a través del Mediterráneo. El contrato esta presupuestado en 74 millones de euros y supone construir una tubería de acero de 300 kilómetros de largo y 1,22 de diámetro, que unirá los campos argelinos de Hassi R’Mel con la localidad de Sougueur. El consorcio adjudicatario está formado por Masa, la empresa de servicios industriales del grupo ACS, y por la constructora argelina Cosider. El plazo de ejecución del proyecto es de 20 meses.
Este es el primer tramo que ha salido a concurso de este macroproyecto que permitirá transportar gas natural desde Argelia hasta Europa. Las españolas Cepsa, Endesa e Iberdrola, junto a empresas argelinas, francesas y británicas, forman parte del consorcio constructor Medgaz que promueve el proyecto. La inversión conjunta que esta sociedad tiene previsto llevar a cabo alcanza los 630 millones de euros.
Las nuevas instalaciones tendrán capacidad para transportar 8.000 millones de metros cúbicos de gas al año. Un segundo tramo de tubería llevará el suministro de gas hasta la localidad costera de Beni Saf, todavía en Argelia. Desde allí, partirá la tercera y última fase, que prolongará el gasoducto por debajo del mar Mediterráneo. Un tramo submarino circulará a 2.150 metros de profundidad durante 200 kilómetros de longitud hasta llegar a su destino final, en la costa de Almería.
Esta previsto que las obras comiencen en julio del año próximo y se espera poder darlas por terminadas en 2009. José Montilla, ministro español de Industria, ha asegurado que el Gobierno considera prioritario este proyecto, dada la creciente importancia del gas como fuente de energía en un contexto de alza continuada de los precios del petróleo. Según Montilla, “el consumo nacional de gas natural podría crecer en 2005 hasta en un 17%”.
Inicialmente, estas instalaciones suministrarán gas al mercado energético español, aunque es muy probable que, en una segunda fase, se establezca una conexión con las redes paneuropeas de suministro.
Desde el sector privado se insiste en la importancia del proyecto. Conrado Navarro, director de gas de Iberdrola, asegura que “este proyecto destacará el papel estratégico de España en el espacio energético que se dibuja en torno al Mediterráneo”.