En 2004 se crearán las primeras UTEs entre empresarios asturianos y lusos

El próximo año se constituirán las primeras uniones temporales de empresas (UTEs) integradas por entidades asturianas y portuguesas. Su objetivo prioritario será el de pujar por obras públicas en la región; así como mantener la región como "objetivo 1" de la Unión Europea, de manera que pueda recibir las subvenciones que son necesarias para llevar al cabo los proyectos.

Los constructores del noroeste de la península ibérica -asturianos y portugueses- han decidido dar un impulso al desarrollo de las infraestructuras de la zona. Es por ello que han llegado a un acuerdo para formar UTEs hispano-lusas a partir del próximo año. Vicente Alvarez Areces, presidente del Principado, se ha comprometido ante los miembros del Consejo de la Construcción del Noroeste Ibérico (CCI) a impulsar este tipo de sociedades con el fin de que puedan empezar a funcionar ya en 2004.
El Consejo, fundado el pasado año para la creación y gestión de una red de cooperación transregional de la construcción, del sector inmobiliario y de abastecimiento de materiales, trata de "dinamizar el mercado y cada una de las empresas y agentes que lo constituyen", ya que la construcción se ha convertido en el principal soporte de la economía del noroeste ibérico.
El colectivo está integrado por empresarios de Asturias, Cantabria, Castilla y León y el norte de Portugal y está presidido por el máximo responsable de la Confederación Asturiana de la Construcción (CAC), Serafín Abilio Martínez, junto al presidente de los constructores del norte de Portugal, Rui Viana nas Caves.
Los representantes de la CAC han destacado la importancia que tiene para el desarrollo de sus proyectos el apoyo a las iniciativas de fomento y creación de infraestructuras, dotaciones y equipamientos en el área noroeste de la península y lo fundamental que es que se siga considerando a regiones como Asturias "objetivo 1" de la Unión Europea. Han insistido también en que el Principado ha sido castigado a lo largo de muchos años con el retraso en la creación de las infraestructuras necesarias en la zona y han señalado la necesidad de recibir más ayudas por parte de la UE para que la región pueda alcanzar la media de desarrollo europea en este ámbito.
Las zonas a las que representa el Consejo de Construcción del Noroeste suman una extensión de 16.000 kilómetros cuadrados, lo que supone el 27% de todo el territorio peninsular, con 10 millones de habitantes, el 20% de la población total.
Las infraestructuras de las que dispone el área a la que se refieren los constructores suman 2.304 kilómetros de redes viarias de alta capacidad, 3.206 de línea férrea convencional y sólo 74 kilómetros de doble vía.
Según el presidente de la CAC, es necesario reclamar la ejecución de las infraestructuras pendientes en el noroeste ibérico para lograr el desarrollo de todo su potencial. Serafín Abilio ha señalado que, de todas las obras que se deben ejecutar en la zona, es de vital importancia "acelerar la autovía del Cantábrico a lo largo de toda la cornisa, además de finalizar los accesos a la meseta, desde Cantabria, a través de autopista". También ha destacado la necesidad de desarrollar el proyecto de la autovía de La Plata y de la incorporación del tren de alta velocidad para Asturias y Galicia.
Con esta finalidad surge el acuerdo que han firmado Vicente Alvarez Areces y los responsables del sector, por el que se creará un equipo técnico integrado por empresarios españoles y lusos que trabajará en impulsar la ejecución de estas "infraestructuras pendientes" en la región.
El jefe del Ejecutivo asturiano ha asegurado que comparte "plenamente" las reivindicaciones de los constructores y ha ofrecido su cooperación "desde todos los puntos de vista".