Ibiza
Redaccion | Lunes 20 de octubre de 2014
Los casos de estafas, alquileres sin contrato, subidas de precios desorbitadas al terminar los cinco años en los que se tiene derecho a disfrutar de la vivienda con un contrato legal, son más o menos habituales en el día a día de las relaciones entre propietario e inquilino en Ibiza.
Prueba de los problemas que dan este tipo de relaciones, tanto a nivel privado como empresarial, son las 551 consultas y quejas que la oficina de información y atención al consumidor de Ibiza y Formentera recibió en 2002 por parte de los pitiusos. Los casos con los que se han encontrado en este centro son de todo tipo, pero las consultas principales figuran en torno a la contratación, la renta y a los gastos y mantenimiento. Un caso corriente es el de personas que pagan por un alquiler cantidades diferentes en invierno y en verano, o que se les cobra una renta distinta a la pactada.