ENTREVISTA

Javier Garcia-Renedo: “Las zonas costeras en desarrollo son una clara oportunidad de negocio”

Redaccion | Lunes 20 de octubre de 2014
Abogado en ejercicio, preside la Asociación Española de Centros Comerciales desde 1996. Su carrera estuvo ligada a Metrovacesa, donde fue secretario general y dirigió varios departamentos entre los que destaca el negocio de centros comerciales. Como representante de este grupo también fue vicepresidente de APCE y de Asprima.

- Según los informes sobre el sector, el mercado español tiene recorrido. Pero en 2004 han disminuido las inauguraciones...
- La infraestructura de centros comerciales actual está vinculada al propio desarrollo inmobiliario español. En este mercado no es relevante que un año haya más o menos centros. Hay que recordar que la gestión de las licencias comerciales puede alterar la planificación. Algunas comunidades autónomas son más ágiles que otras en estos trámites. De las diecisiete, nueve se encuentran hoy en moratoria. Esto hace que el desarrollo de un proyecto se sitúe entre los 3 y los 7 años. En 2003 se explotaron un millón de metros cuadrados, algo excepcional. En 2004 se inauguraron 800.000 metros cuadrados. Una cifra similar a la que habrá este ejercicio.

- ¿Están flexibilizando las CCAA sus normativas comerciales?
- Sí, hay avances. Algunas comunidades autónomas que siempre se mostraron reacias a la expansión de los centros comerciales están matizando su postura. En Cataluña se debate la ley de equipamientos comerciales, que podría desbloquear la situación de moratoria y que prevé utilizar estos centros como instrumentos de renovación urbana. También Aragón está a punto de levantar su moratoria. Y Castilla y León se encuentra en un proceso de liberalización.

- El 69% de los centros de 2004 fueron promovidos por españoles, ¿por qué?
- En el desarrollo de los centros comerciales prevalecen los aspectos inmobiliarios. Aunque el inversor sea internacional, en la promoción es importante el conocimiento del territorio y la relación con las autoridades. Sigue siendo un negocio muy local.

- Los promotores residenciales, ¿muestran interés por el área comercial?
- Los promotores que desarrollan nuevas partes de la ciudad saben que hay que dotar a esas áreas de infraestructuras comerciales. De un modo casi intuitivo, y cada vez más con objeto de diversificar sus empresas, están entrando en el negocio de promoción. Otro tema es la inversión. Salvo las cuatro o cinco grandes empresas cotizadas de España con negocios estables en centros comerciales, el resto aún no ha entrado en el tema de inversión. El centro comercial es un producto inmobiliario estable, así que no creo que tarden en hacerlo.

- ¿Existen en España zonas emergentes de cara a futuros desarrollos?
- Además de las grandes urbes, como Madrid, Barcelona, Valencia, Málaga y la franja norte entre Guipúzcoa, Vizcaya, Cantabria y Asturias, donde la inercia del crecimiento genera oportunidades, existen proyectos interesantes en las zonas costeras emergentes. Ahí habrá oportunidades de negocio claras, no sólo porque la población de esas áreas tiene un nivel adquisitivo alto, sino también porque el centro comercial funciona como elemento aglutinador de la vida social.

Por otra parte, creo que estos centros van a ser un instrumento básico de regeneración urbana. Esto es algo que ya se está viendo en Cataluña.

- ¿Cuáles son los mercados internacionales más activos en el sector?
- Principalmente, China. Actualmente tiene más de 350 proyectos en ejecución. Con respecto a los países del Este, caben algunas reservas, a pesar de la creciente necesidad de estas infraestructuras. No crecen a tasas equiparables a las de los quince de la UE y demográficamente son regresivos, por lo que el mercado comercial no es representativo.

En Italia hay oportunidades, porque se está dando un movimiento liberalizador en torno al desarrollo de centros comerciales
De cara a la próxima década, el mercado apunta a la India como gran país en desarrollo; y a Turquía, por el gran auge demográfico que está viviendo y porque Estambul es una urbe de catorce millones de habitantes que concentra una parte sustancial del poder económico del país.

Noticias relacionadas