FIRMAS

Datos contradictorios, buenas expectativas

El rincón del curioso/Jorge G. Boró

Redaccion | Lunes 20 de octubre de 2014
En las últimas semanas se han dado a conocer datos sobre el sector inmobiliario que, en principio, pueden parecer contradictorios. Mientras las cifras de diversos colectivos profesionales, asociaciones y consultoras describen una ralentización en las ventas y un aumento en los plazos de comercialización, las ventas, la facturación y los beneficios de las promotoras inmobiliarias mantienen su ritmo de crecimiento de años anteriores y, en muchos casos, aumentan.

Los datos sobre el sector residencial indican que sigue el crecimiento, pero a un ritmo menor que en ejercicios anteriores, algo que no se considera malo, pues servirá para que se ajusten los niveles de oferta y demanda. Esto no tienen por qué ser contradictorio con el crecimiento de las empresas, puesto que puede ser que las ventas se hayan concentrado en ciertas empresas en detrimento de otras menos profesionalizadas y que acuden al sector en los momentos de bonanza. Este es otro de los motivos por el que los promotores consideran buena esta cierta ralentización.

La que no para de recibir golpes es la ministra de Vivienda, María Antonia Trujillo. El último le ha venido del Banco de España que, a través del director de Regulación y Transparencia, ha defendido la utilización de los datos facilitados por las tasadoras sobre los precios de la vivienda para la elaboración de las estadísticas oficiales. José Gómez de Miguel echa por tierra la opinión de la ministra que no consideraba válidos estos datos y que incluso anunció la retirada de las estadísticas, aunque luego tuvo que rectificar por presiones de la Presidencia del Gobierno y publicarlos en la página web de su Ministerio al día siguiente de sus manifestaciones públicas.

No ha tenido suerte la ministra en sus manifestaciones desde que fue nombrada y es una de las peor valoradas del Gobierno de Zapatero. Las apuestas en el sector se cruzan sobre la fecha en la que cesará en su cargo. Evidentemente, no se va a producir una crisis de Gobierno cuando ha transcurrido tan poco tiempo desde que se nombró, pero lo que parece claro es que cuando se produzca, Trujillo será una de las primeras en salir.