Mientras España vivió un incremento del 17,4%, la subida media de los pisos en la UE fue del 7,2%
Redaccion | Lunes 20 de octubre de 2014
Por ello, la entidad pide cautela y asegura que el fuerte ritmo de incremento observado en algunos países, con España a la cabeza, "exige una estrecha vigilancia de la evolución del mercado", dado que estos incrementos pueden acabar afectando a la marcha la economía.
En un estudio titulado "Tendencias Recientes de los Precios de los Inmuebles Residenciales en la Zona del Euro", el BCE destaca la diferencia de evolución de los precios entre países puesto que, mientras se observó una desaceleración en Países Bajos, Grecia e Irlanda, España continuó con incrementos fuertes que no denotan ningún parón, sino todo lo contrario.
Además, durante el pasado año, los precios descendieron en Alemania y se apreció una "fuerte desaceleración" de las subidas en Portugal, afectados ambos países por problemas económicos.
El BCE apunta además que los últimos datos trimestrales disponibles para el 2004 confirman los pronunciados incrementos de los precios de los inmuebles residenciales registrados en España y sugieren una aceleración adicional en Francia y Finlandia.
También se aprecia la desaceleración de los precios en Grecia e indican que la situación se mantendrá, en general, estable en los Países Bajos y Portugal, con moderados aumentos de los precios de la vivienda en comparación con la media de la zona del euro.
Entre 1999 y 2003, los precios subieron en España algo más de un 10%, cifra sólo superada por Irlanda y Holanda, con incrementos del 20% y el 15%.