INMOBILIARIO

BBVA denomina Anida a su división inmobiliaria

El objetivo es alcanzar un beneficio en 2006 de 115 millones

Redaccion | Lunes 20 de octubre de 2014
El BBVA ha decidido dar un giro a su división inmobiliaria, a la que ha denominado Anida. El objetivo es alcanzar un beneficio en 2006 de 115 millones y dar el salto de la décima posición que ocupa ahora a convertirse en una de las tres primeras firmas del sector en 2007.

Han pasado dos años desde que el banco vendiera su participación mayoritaria en la inmobiliaria Metrovacesa. Y ahora, el banco considera que ha llegado el momento de impulsar una nueva estrategia en este segmento del negocio, incluido en su unidad de banca mayorista y de inversión. La razón es clara para el BBVA. 'El negocio inmobiliario es estratégico para el banco por su tradicional presencia en el sector y por las sinergias con el negocio bancario tanto desde el punto de vista del cliente promotor como del cliente particular a través de la actividad hipotecaria', subrayó ayer José María Abril, responsable de banca mayorista y de inversiones del bagrupo.

Para impulsar esta división, el BBVA ha optado, por crear una nueva marca inmobiliaria, Anida (de anidar) y poner en marcha un plan estratégico a tres años, cuyo objetivo final es alcanzar unos beneficios netos de 115 millones en 2006. Para el presente año el BBVA espera un beneficio neto de 66 millones de euros, el 57% más que en el ejercicio precedente. De esta forma, el banco pretende convertirse en una de las tres primeras firmas inmobiliarias españolas, según explicó ayer Jesús García de Ponga, director del área Inmobiliaria de BBVA.

Ahora esta división es la décima del sector por resultados, detrás de Reyal, aunque se sitúa ya entre las principales por eficiencia y rentabilidad. La primera por resultados es Metrovacesa, la segunda Vallehermoso y la tercera Realia, según las mismas fuentes.

El plan de negocio de Anida se basará ahora en la compraventa de suelo, que absorberá el 75% de su actividad, y en la promoción residencial, que copará el 25% restante. Para llevarlo a cabo, BBVA seguirá con su política de llegar a acuerdos con socios locales, potenciar la rotación de su cartera y especializarse en productos.

La estrategia de la inmobiliaria pasa por la promoción residencial, especialmente de primeras viviendas en ciudades de más de 200.000 habitantes (70% del total de la inversión) y en zonas turísticas de expansión para construir segundas residencias.

Las razones de esta especialización están, según la entidad, en 'sus atributos de inversión familiar, relacionados con el banco'. Así, Anida renuncia a dedicarse a los servicios, porque exigen 'grandes estructuras', ni al alquiler de inmuebles, por su escasa rentabilidad, 'especialmente para una empresa cuya matriz es una entidad bancaria, que trabaja con márgenes superiores al 20%'. La nueva denominación de la división inmobiliaria del BBVA no saldrá a Bolsa como sus más directos rivales por el momento, ni tampoco se constituirá en una nueva sociedad. El BBVA también descarta compartir Anida con otro socio, explica García de Ponga. El BBVA espera que la rentabilidad de su actividad inmobiliaria alcance un ROE (rentabilidad sobre recursos propios) del 40% en 2005. Ahora es del 34,6%.