El desarrollo del proyecto ha costado más de 236 millones de euros
Redaccion | Lunes 20 de octubre de 2014
El nuevo edificio del Museo de Arte Moderno de Nueva York (Moma) abrirá sus puertas dentro de seis meses, coincidiendo con su 75 aniversario. Las autoridades del Moma han invertido en el proyecto, diseñado por Yoshio Taniguchi, más de 346 millones de euros. El inmueble se caracteriza por un estilo minimalista y por la utilización de vidrio y granito. El nuevo edificio se conecta con el antiguo a través de una torre de 54 pisos.
David Jara.
Nueva York
El 20 de noviembre de 2004, fecha en la que se celebra su 75 aniversario, abrirá de nuevo sus puertas el Museo de Arte Moderno de Nueva York (Moma). El proyecto de ampliación del edificio ha sido diseñado por el arquitecto japonés Yoshio Taniguchi y supondrá una inversión total de 425 millones de dólares (algo más de 346,50 millones de euros).
El director del museo, Glenn Lowry, sin quitarle importancia a los trabajos del arquitecto, ha insistido en que éste “no debe competir con las colecciones allí expuestas”, sino que tanto el edificio como las obras que alberga son importantes representaciones artísticas.
La imagen exterior del inmueble se caracteriza por un estilo minimalista de estética reduccionista. En el interior, cada parte está diferenciada mediante la utilización de distintos materiales, lo que crea una imagen en distintos planos, formados por paneles de vidrio o placas de piedra, que encajan unos con otros formando una imagen de mosaico.
Lowry ha destacado que Taniguchi recibió muy pocas directrices, pero que sí se le pidió que el jardín “permaneciera exactamente igual” y que el edificio estuviera “bañado de luz”.
El principal obstáculo que encontraron los diseñadores cuando se les pidió realizar la ampliación del museo sin uniones fue la torre de 54 pisos que se encuentra situada entre la parte antigua y la nueva y en la que residen 248 personas. Como la solución de demolerla era inviable, se optó por atravesarla con pasajes y escaleras mecánicas, para lo que se han tenido que colocar vigas de acero en los nueve primeros pisos.