FIRMAS

Los alcaldes madrileños contraatacan

pasaba por allí/Olga Heras

Redaccion | Lunes 20 de octubre de 2014
Que Rafael Simancas revalidará el cargo de secretario general de la FSM en el próximo congreso de esta Federación, es algo que se da por hecho en los círculos influyentes del socialismo madrileño. Lo que no parece tan claro es que el citado cónclave resulte para el candidato un plácido paseo. El líder socialista, además de tener que rivalizar con esa candidatura “Pepito Grillo” presentada por el ex diputado Antonio Carmona (la verdad es que no suscita grandes temores), tendrá también la presión de alcaldes y significados dirigentes del PSOE madrileño, que quieren dejar clara su importancia en la nueva dirección regional.

Veteranos regidores como José Luis Pérez Ráez, Pedro Castro, Antonio Fernández o José Caballero (Leganés, Getafe, Pinto y Alcobendas, respectivamente) aúnan estos días voluntades para que el congreso, previsto para mediados del mes de julio, no les margine en los órganos de decisión, tal y como ha ocurrido tradicionalmente en la FSM. El poder municipal, por tanto, va a sostener su particular pulso con Rafael Simancas, que necesita, y mucho, de su respaldo para alcanzar la Secretaría General.

Los munícipes habrían dejado a un lado pasadas adscripciones “familiares” para formar un poder real frente a tanto alto dirigente que, en su opinión, no pasa por el tamiz del refrendo de las urnas. Una estrategia para ganar protagonismo que, éstos y algún que otro regidor, ya intentaron hacer efectiva en el congreso en el que Cristina Alberdi fue nombrada presidenta de la FSM, y que fue conocida entonces como “Platajunta” de alcaldes.

El intento falló, y con ello se disiparon los temores que la posible unidad de acción de los alcaldes despertaban. Sin embargo, en esta ocasión, con las salvedades, entre otros, de Manuel Robles y Tomás Gómez, alcaldes de Fuenlabrada y Parla, respectivamente, quienes guardan una estrecha vinculación con Ruth Porta, los regidores socialistas más veteranos sí están dispuestos a tomarle el pulso a la dirección regional, cuyo núcleo duro viene planteando unas jubilaciones poco consensuadas para muchos de estos históricos dirigentes.

Simancas quiere despejar el camino de incómodos referentes políticos, y de ahí los “ofrecimientos en masa” (casi todos ellos simples cebos) que se han hecho desde el mismo 15 de marzo a los alcaldes con más veteranía, a quienes se prometió “con toda seguridad” encontrarles acomodo en el Gobierno de Rodríguez Zapatero. Pero de lo dicho nada hasta el momento. Ninguna de estas ofertas laborales se han concretado, y el malestar es patente entre quienes confiaron en las promesas de los altos cargos de la FSM.

Mucho ruido y pocas nueces entre el grupo de Rafael Simancas, cuyo principal valedor hasta ahora es el jefe del acostismo. Salvo José Acosta, que aleccionó a sus huestes sobre la idoneidad de que Simancas renueve como secretario general (otra cosa es el apoyo a las personas de su cúpula, es decir, Antonio Romero y Ruth Porta), el resto de dirigentes se mantienen expectantes al próximo discurrir de los acontecimientos, a excepción de ese sector crítico con alternativa propia en la persona de Antonio Carmona y a un municipalismo que ha optado por rearmarse.

La guinda la ponen esas agrupaciones locales en pie de guerra, fundamentalmente las de Rivas-Vaciamadrid, Alcalá de Henares o Humanes. El socialismo de estos municipios ha vivido importantes conflictos internos por sus desacuerdos con el regional, lo que en su momento provocó la disolución de estas agrupaciones y su administración por gestoras presididas por Romero y Porta.

La agrupación de Humanes ha sido recientemente constituida, pero los problemas se mantienen al haber suprimido, al parecer, del censo a todos los militantes conflictivos, que no han podido participar en la elección de delegados para el próximo congreso.

Sólo la voluntad del federal de dar imagen de unidad en las distintas federaciones del PSOE, hace que las serias divergencias que anidan en la madrileña se mantengan en un segundo plano y que Simancas parta como favorito en esa accidentada carrera en que se ha convertido el liderazgo de la FSM.