Gema Fernández
Redaccion | Lunes 20 de octubre de 2014
Los tiempos avanzan que es una barbaridad”, decía un personaje de una antigua película española. Y no se alejaba mucho de la realidad, al menos en lo que a tecnología aplicada al hogar se refiere. Hace un par de años se conocía muy poco de la domótica, y a la mayoría de los promotores la ‘palabreja’ le sonaba si no a ‘chino’, sí a algo demasiado novedoso, complicado de instalar y, por ende, caro. Es decir, que ninguno de ellos se sentía inclinado a apostar por ser pionero en este campo.
Hoy por hoy, la domótica no es ciencia ficción, sino que se ha convertido en una realidad palpable que ya se aplica en muchos hogares españoles, y que esta semana ha estrenado su propia feria. Valencia ha sido la encargada de dar a este floreciente sector de negocio el empujón que le faltaba. Muchos han sido los curiosos que se han acercado a Domogar para conocer de primera mano las novedades que trae la casa del futuro, algo que, por otra parte, está muy presente en todas las ferias inmobiliarias de España, véase el Salón Inmobiliario de Madrid o Barcelona Meeting Point. Sólo que, en este caso, todas las empresas que trabajan en este mercado se han reunido bajo un mismo techo.
Muchos son las ventajas que prometen los nuevos aparatos domóticos que, con una simple conexión a la red y a un ordenador central, pueden hacernos la vida más cómoda, porque, para las empresas que trabajan en este sector, de eso se trata precisamente: de ofrecer mayor confort y seguridad al cliente.
En poco tiempo también utilizaremos el teléfono móvil para poner en marcha la lavadora o el horno, encender el aire acondicionado o la calefacción antes de llegar a casa.