CONSTRUCCIÓN

Los fallos en la construcción y la falta de calidad cuestan más de 12.000 millones de euros al año

Intemac denuncia que las "fortísimas presiones corporativas" impiden un control de calidad eficaz

Redaccion | Lunes 20 de octubre de 2014
Durante la presentación de un informe sobre el control de calidad de la construcción en España, González Valle señaló que se trata de una actividad "necesaria y mal regulada", y llamó la atención sobre la existencia de "fortísimas presiones corporativas" para hacer "ineficaz" la actuación del control de calidad.

Frente a las pérdidas de 12.000 millones de euros que provocan los fallos en todas las fases de la construcción, la inversión en control técnico o de calidad no alcanza el porcentaje del 0,5% sobre la producción total del sector en España, que se eleva a 100.000 millones de euros.

El vicepresidente de Intemac llamó la atención sobre el hecho de que el mayor control se ejerce, por este orden, sobre los materiales, la ejecución y el proyecto, mientras que debería ser precisamente al revés, ya que el proyecto y la ejecución requieren un control más elevado.

En este sentido, el informe revela que el proyecto acapara el 40% de las causas de los siniestros registrados en la construcción, seguido por la ejecución, con el 35%, y los materiales, con el 10%, según explicó el ingeniero de caminos Luis Villegas, uno de los autores del estudio.

Según los datos de diversas organizaciones internacionales, el porcentaje que supone el coste de los fallos en la construcción en relación con la producción total del sector supera en España el 10%, mientras que en los países nórdicos, donde la construcción está "más organizada", oscila entre el 5% y el 6%, señaló Villegas.

Entre las anomalías detectadas por el informe, se encuentran identificar ensayos de materiales con control de calidad, abonar los honorarios del control de calidad externo a través de la propia empresa construtora y contratar el proyecto y la dirección de obra junto a la supervisión y el control de las obras, entre otras.

A juicio de los autores del estudio, no es misión directa de los poderes públicos intervenir para evitar la mala calidad y conventirse en la organización que realice todos los controles, pero sí establecer y armonizar los cauces para que no sea rentable la mala calidad, resaltó el arquitecto Bernardo Perepérez, otro de sus autores.

Las conclusiones del informe se resumen en que el control ha de ser preventivo para ser eficiente, así como totalmente independiente, y requiere organizaciones de control cada vez más "complejas y capacitadas". Sólo en el caso de reunir estas condiciones "alcanza un valor añadido importante", según Perepérez.

El informe ha sido elaborado por cuatro catedráticos independientes -los arquitectos Emilio Barberá y Bernardo Perepérez y los ingenieros de Caminos, Canales y Puertos Antonio Marí y Luis Villegas-, a petición de las empresas del sector de control técnico A.T. Control, Atisae, Euroconsult, Intemac y Vorsevi.