Redaccion | Lunes 20 de octubre de 2014
El espectacular aumento de la demanda de la práctica de golf por parte de los turistas, tanto nacionales como extranjeros, ha hecho que la oferta de alojamiento en la costa vinculado a este deporte, no sólo esté compuesta por las grandes urbanizaciones construidas en torno a un campo, sino también por los complejos hoteleros especializados, que han visto incrementadas sus ganancias.
Así, los 175 hoteles españoles orientados al turismo de golf facturaron 1.400 millones durante el año pasado, lo que representa un 14,3% más respecto a 2002, según recoge el informe de la compañía de análisis de sectores económicos DBK.
El 71% del total de la facturación correspondiente al pasado ejercicio, unos 995 millones, correspondió a hoteles integrados en cadenas, mientras que el 29% restante, un total de 405 millones, fue registrado por establecimientos independientes.
La previsión es que la facturación acumulada de estos establecimientos alcance los 1.850 millones en 2005 y los 2.450 en 2007, con ritmos bienales de crecimiento del 15%.
Si bien hoy en día, los 175 establecimientos agrupan un total de 36.000 habitaciones, un 2% de las plazas totales existentes en el mercado español, los pronósticos de DBK son que España cuente en 2005 con 250 hoteles vinculados a la práctica del golf, alcanzando los 330 establecimientos en 2007, lo que se traduciría en una oferta de 48.000 y 63.000 habitaciones, respectivamente.
Otro subsector inmobiliario que ocupa un pequeños espacio en la playa es el de las residencias de tercera edad en costa. Las previsiones acerca del número de jubilados para un futuro próximo provocaron una oleada inversionista por parte de las promotoras hace tres o cuatro años, pero la baja ocupación que se observaba en este tipo de centros restó rentabilidad a estos proyectos, provocando un parón inversor.