Una olla a presión

El seno accionarial de Sacyr Vallehermoso se ha convertido en una olla a presión que ya ha comenzado a echar humo. Pero nadie ha sido capaz de apagar el fuego, al contrario, son muchos los que siguen avivándolo esperando que la olla estalle por algún lado.

Al endeudamiento de la empresa para adquirir ENA y Vallehermoso, entre otras compañías internacionales, se une ahora el deseo de su núcleo duro -Loureda, Del Rivero y Abelló- de hacerse con la participación que Veolia tiene en FCC a través de la sociedad B-1998. Todo ello, sin olvidar el pulso interno que mantienen sus accionistas de referencia por hacerse con el porcentaje accionarial más alto. Un pulso al que, en los últimos meses, se han sumado las cajas de ahorro, la más reciente Caixa Galicia.

Pero el órdago más grande lo ha echado Fernando Martín. El empresario vallisoletano quiere un sillón en el órgano de gobierno de la compañía y está dispuesto a todo para conseguirlo. De momento, sólo ha obtenido una negativa rotunda por parte del núcleo duro, encabezado por Del Rivero, con quien Martín mantiene un mano a mano muy tenso, que prefiere ‘librarse’ de una situación que considera molesta facilitando la venta de la participación del 6,3% de Martín en SyV a un nuevo socio que resulte más a su gusto.

Ambos empresarios comparten palco en el club merengue, aunque mantienen las distancias, pero ya se sabe que el fútbol es como un confesionario y allí se deciden también muchos negocios. El último rumor habla del deseo de Luis del Rivero de ser el presidente de SyV cuando Loureda abandone el cargo, algo que podría suceder en 2005, con el permiso de Abelló.