AUTONOMÍAS

El soterramiento del tren a su paso por la capital alavesa costará 328 millones

Las obras en Vitoria se prolongarán durante más de tres años y medio

Redaccion | Lunes 20 de octubre de 2014
La línea de tren que ahora mismo divide el centro de la ciudad de Vitoria en dos zonas bien diferenciadas podría dejar de ser una barrera, una vez que, desde el Ministerio de Fomento, se ha dado el visto bueno al soterramiento de las vías a su paso por la capital alavesa. Las obras costarán más de 328 millones de euros y se prolongarán por espacio cercano a cuatro años.

Garbiñe Esteban.

Vitoria

El gran deseo de eliminar la barrera que supone el trazado ferroviario a su paso por Vitoria va tomando forma. Las líneas que comienzan a perfilarse hablan de un coste de 328 millones de euros y un plazo de ejecución de unos 3 años y medio, durante los cuales, la ciudad no se vería afectada de una manera demasiado perjudicial por los trabajos.

Así lo ha explicado el alcalde, Alfonso Alonso, una vez que el Ministerio de Fomento ha aprobado la solución propuesta desde Vitoria en previsión de la llegada a la ciudad de la línea de alta velocidad desde Madrid. El proyecto presentado proponía soterrar las vías desde Ali hasta Zurbano, en total unos siete kilómetros de longitud, dejando por encima el bulevar de Euskal Herria, Juan de Garay, la avenida del Cantábrico y el Fernando Buesa Arena, incluyendo una gran estación intermodal en el parque de Arriaga.

Este trazado es del agrado del Ministerio, que encargó a la ingeniería Prointec el análisis de la propuesta que en Vitoria diseñó la empresa Sener. La viabilidad del plan ha quedado certificada y se han propuesto tres sistemas diferentes de excavación que originarían tres costes finales diferentes.

La excavación del túnel podría realizarse a cielo abierto, en mina o con tuneladora. La opción más económica sería la primera, con un precio de 310 millones de euros. El gran inconveniente sería que se llenaría la ciudad de grandes zanjas durante unos cinco años. La excavación con tuneladora sería la opción más cara, 444 millones, con un plazo de ejecución de unos cuatro años.

Tras una primera valoración, Alonso considera que la opción más razonable es la excavación en mina, una solución intermedia, con máquinas más económicas que las tuneladoras, que evitarían las enormes zanjas en el centro mientras se prolongaran los trabajos, unos tres años y medio, y cuyo coste ascendería a 328 millones de euros.

Se excavarán dos túneles paralelos, uno con una doble vía de ancho internacional para la alta velocidad, y otro, con vía única de ancho ibérico para las mercancías. Entre los dos habrá 12 metros de separación, y ambos se encontrarán a una media de profundidad de unos 15 metros.

Aunque ya se van perfilando detalles, Fomento y la Administración local deben reunirse para concretar más detalles y, una vez alcanzado un acuerdo definitivo, se procederá a la exposición pública, se recogerán las alegaciones existentes, se realizará la oportuna declaración de impacto ambiental y, entonces, podrán contratarse las obras.

El alcalde de la ciudad no ha querido hablar de fechas posibles para el inicio de las obras, pero desde Fomento ya se hablaba hace unos meses de que en ningún caso podrían tener lugar antes del año 2007.

La financiación, a pesar de la envergadura del proyecto, no parece preocupar demasiado. Alonso ha recordado que Fomento ha prometido para este plan 132 millones de euros, así como la cesión a la ciudad de los terrenos que queden libres una vez que las vías dejen de ocupar la superficie.

El Ayuntamiento, en un primer bosquejo de las posibilidades de estas parcelas, considera la posibilidad de construir más de 1.800 viviendas y una gran avenida. Con la ayuda del resto de las instituciones, las obras serían “financiadas sin grandes problemas. No se trata de exprimir las plusvalías del corredor que quedará libre, aunque podríamos. Confío en que habrá colaboración del Gobierno vasco y de la Diputación”, ha dicho Alonso.