El sistema ya está dando buenos resultados en Navarra y en País Vasco
Redaccion | Lunes 20 de octubre de 2014
La movilidad del parque de pisos vacíos en Asturias, cuyo número ascendía a 66.873 en el último censo de población y vivienda del año 2001, es una de las fórmulas que la Consejería de Vivienda del Principado está estudiando para impulsar la oferta de alojamientos a través de arrendamientos.
Hasta que se pueda conocer la demanda de pisos protegidos en alquiler que hay actualmente en el mercado, el Gobierno autonómico parece decantarse porque sea la empresa pública Viviendas del Principado de Asturias (Vipasa) la que se encargue de la gestión de estos inmuebles vacíos antes de sacarlos al mercado y poder disponer así de una parte importante del total de viviendas protegidas que se ha fijado como objetivo el Ejecutivo asturiano.
La idea de la consejería que preside Laura González es que Vipasa garantice al propietario de la vivienda vacía que se le entragará el inmueble en el mismo estado de conservación en el que se recibió. En el plan que elabora la consejería de Vivienda también se recoge que el Principado garantizará al propietario que va acobrar el importe del alquiler, ya que los pagos correrán a cargo de la administración regional.
Por su parte, la empresa municipal de viviendas de Gijón ya ha iniciado la campaña de promoción de este parque de inmuebles vacíos y los primeros resultados son bastante satisfactorios. Además, ya se han recibido ofertas de algunas compañías de seguros interesadas en este nuevo sistema de alquiler.
Esta fórmula para dinamizar el mercado de alquiler no es nueva. En Navarra y en el País Vasco el sistema se está utilizando y está dando unos resultados positivos. Por este motivo, el director general de Vivienda, Manuel González Orviz, ha señalado que Vipasa tomará como referencia las experiencias de estas dos comunidades autónomas, ya que en Galicia, la otra región en la que se ha puesto en marcha, “se está produciendo un encarecimiento sustancial de la vivienda”. Además ha insistido en que se deben “hacer los ajustes que haya que hacer de forma tranquila, dialogada, con rigor y sin dar saltos en el vacío”.
En cuanto a las pautas que se seguirán para adjudicar los pisos de alquiler, están aún en estudio. Uno de los modelos de referencia que podría elegir el Principado es el que se está llevando a cabo en la comunidad de Cantabria, donde se han creado recientemente bolsas de viviendas para conocer la demanda de la población por este régimen de tenencia.