AUTONOMÍAS

A Coruña da marcha atrás en la idea de construir un rascacielos de 27 plantas

La decisión supondrá revisar el plan urbanístico de la ciudad por tercera vez

Redaccion | Lunes 20 de octubre de 2014
El rascacielos de 27 plantas que estaba previsto construirse en el barrio coruñés de San Roque ha dejado de ser una posibilidad para convertirse en un nuevo paso atrás en materia de urbanismo, ya que el Gobierno local tendrá que modificar por tercera vez el Plan General de Ordenación Municipal. En lugar del inmueble, que contaba con la oposición de vecinos, arquitectos y BNG, se levantarán edificios de nueve plantas con un gran patio interior.

Marisa Prado
A Coruña

El Ayuntamiento de A Coruña ha dado marcha atrás a su intención de construir un rascacielos de 27 plantas en el barrio coruñés de San Roque para levantar en su lugar una manzana con varios edificios de nueve plantas que contará con un gran patio interior, tal y como estaba previsto en el primer borrador del Plan General de Ordenación Municipal (PGOM).
La medida adoptada por el Gobierno local hace poco más de un año contaba desde el primer momento con el rechazo, tanto de los vecinos de la zona como de una parte de la oposición, concretamente del Bloque Nacionalista Galego (BNG), así como de la delegación en A Coruña del Colegio de Arquitectos, que consideraba que un inmueble de esas características proyectaría una gran sombra sobre el paseo marítimo, el mar y otros edificios.
Todos estos colectivos habían presentado alegaciones a las modificaciones que se tuvieron que efectuar para poder aprobar la edificación de un rascacielos que únicamente había satisfecho al grupo de gobierno y al PP, quien hizo suyos los planteamientos socialistas que señalaba para justificar la acción como que “sería un edificio bonito y estético”.
En mayo de 2002 se decía que el rascacielos permitiría liberar una plaza pública de 5.000 metros cuadrados y “ennoblecería la ciudad”, según destacaba el entonces concejal de Urbanismo, Salvador Fernández Moreda.
Pero en 2003, el mismo edificio ya no es factible, y lo que el pasado año “mazacotaría toda la manzana”, en referencia clara al inmueble cerrado con nueve plantas que se había planeado en un principio, ha pasado a ser de nuevo una opción válida, porque “iguala las alturas con las edificaciones existentes”, según explica el nuevo concejal de Urbanismo, José Luis Méndez, volviendo a las tesis mantenidas en el primer PGOM.
Además, en la nueva revisión del plan urbanístico municipal se prevé la apertura de un vial de 21 metros de ancho que conecte la calle Argentina con el paseo de Ronda, a través de una pequeña zona verde que separará esta zona de la Escuela Superior de Marina Civil.
Ahora, el documento deberá ser aprobado por el Gobierno gallego, que exige una serie de modificaciones que se refieren a cálculos de aprovechamiento del solar, algo que desde la Corporación local consideran fácilmente subsanables. El siguiente paso es la aprobación de las modificaciones efectuadas por el pleno del Ayuntamiento coruñés.
El inmueble que se iba a edificar en esta zona constaba de 27 plantas, en pleno paseo marítimo, y contaba con una plaza pública en la parte trasera. La mayor parte de la superficie aprovechable se situaría en la parte baja del inmueble -entre la segunda y la octava tendrían 1.805 metros cuadrados-, mientras que desde la décima a la 26 se reduciría a 580 metros cuadrados. El ático ocuparía 461 metros cuadrados.

Dos nuevos rascacielos.- Sin embargo, el rascacielos previsto en San Roque no es el único que se pretendía construir en la ciudad, ya que en As Percebeiras, en la zona del paseo marítimo del Orzán, un grupo de constructores presentó en el registro de la Concejalía de Urbanismo una propuesta para edificar en este área dos rascacielos, uno de 35 plantas y otro de 47, que se convertirán en los edificios más altos no sólo de la ciudad herculina, sino de toda Galicia.
El proyecto prevé, además, la construcción de otros tres edificios que flanquearán a los dos rascacielos. El más bajo se situará a un costado del rascacielos más alto, y los otros lo harán junto al más bajo. En total, la actuación supondrá edificar en unos 12.500 metros cuadrados de terrenos, mientras que la superficie que se cederá para uso público se sitúa en 25.000 metros cuadrados, de los 37.000 disponibles.