Redaccion | Lunes 20 de octubre de 2014
El año que acabamos de comenzar se presenta lleno de incertidumbres para el sector inmobiliario. Esto no quiere decir que vaya a ser peor que el recientemente finalizado sino que han cambiado diversas variables que condicionan al sector. Para empezar, ha desaparecido la deducción fiscal por la compra de vivienda para las personas que ingresen por encima de los 24.000 euros anuales, a excepción de la Comunidad de Madrid que mantiene esta deducción con independencia de los ingresos. Esta medida puede afectar a la adquisición de vivienda puesto que se reduce la capacidad de compra para muchas familias, que incluían la devolución que recibirían en su declaración de la renta en sus cálculos para acceder a una vivienda.
Esta eliminación de la deducción fiscal por la compra de vivienda se podría compensar, según algunos expertos, si los precios de las viviendas continúan su descenso. Los promotores han criticado la eliminación de esta deducción pero será una vez más el tiempo el que determine los efectos que vaya a producir sobre el sector inmobiliario.
El Ejecutivo que preside José Luis Rodríguez Zapatero ha eliminado también la ayuda directa a la entrada que concedía para la compra de Viviendas protegidas, aunque ha argumentado que la compensa con otras medidas aprobadas en el Real Decreto que modifica el Plan de Vivienda y Rehabilitación 2009-2012, publicado en el Boletín Oficial del Estado en el pasado mes de diciembre.
Estas son las incertidumbres en el subsector residencial. En el resto de los subsectores, habrá que estar pendientes si se produce algún atisbo de recuperación económica.