AUTONOMÍAS

El aeropuerto de Barcelona estrena nueva zona comercial y amplía la terminal A

En ambos proyectos se han invertido 31,40 millones

Redaccion | Lunes 20 de octubre de 2014
El aeropuerto de Barcelona continúa mejorando sus instalaciones. Acaba de ampliar la terminal A en 24.358 metros cuadrados, y ha inaugurado una nueva zona comercial de 1.259 metros en la zona de embarque de la terminal B. Ambas actuaciones han supuesto una inversión de 31,40 millones de euros, a cargo de Aena.

Josep Ferrer
Barcelona

La ampliación de la terminal A del aeropuerto de El Prat, la de vuelos internacionales, ha supuesto la construcción de un nuevo edificio anexo al actual. El módulo M-5 dispone de una luminosa y espaciosa sala de espera de 2.629 metros cuadrados con seis nuevas pasarelas para acceder y salir de los aviones, tres nuevas cintas para recoger los equipajes y una nueva zona comercial de cerca de 3.000 metros cuadrados. Con el módulo M-5, que ha supuesto una inversión de 27,10 millones de euros, Aena pretende dar un mejor servicio a los pasajeros, puesto que la terminal A se había quedado pequeña, prácticamente desde los Juegos Olímpicos de 1992.
La nueva zona comercial de la terminal B está situada en la primera planta del edificio. Cuenta con siete tiendas, un restaurante y un centro de negocios. La cadena textil Zara, que ha abierto su primer establecimiento en un aeropuerto, actúa de motor. A su lado se han instalado, la también firma textil de moda joven Springfield, del grupo Cortefiel; la cadena francesa Etam, de ropa interior y bañadores; Sibaris, dedicada a productos de comida selectivos; SBT, de venta de calzados; The Food Galery, de alimentación; y Súper del Arte, una galería de arte que es la gran novedad y que significa una apuesta del departamento comercial del aeródromo barcelonés para dotar a la instalación de un establecimiento de estas características.
La zona se completa con un bar-restaurante con self-service denominado Europa y un centro de negocios con conexión a Internet y preparado para que los pasajeros puedan realizar cualquier gestión y trabajo mientras esperan el avión.
Las tiendas del nuevo área comercial de la terminal B están situadas alrededor de una gran plaza cubierta con una bóveda de cristal que permite la entrada de luz natural y da sensación de apertura hacia el exterior. El nuevo acceso a este recinto se hace de manera directa, ya que los controles de seguridad de la primera planta han modificado su ubicación de manera que una vez superado este filtro los pasajeros se encuentran directamente con los comercios. En esta nueva zona se han invertido 4,30 millones de euros.