Un proyecto que se ubicará a las orillas del Golfo Pérsico
Juan Carlos Tamayo | Lunes 20 de octubre de 2014
07/02/2008.- El estudio del arquitecto Norman Foster se supera a sí mismo diseñando una población en la que sólo existe el transporte público y que no generará residuos ni emitirá dióxido de carbono a la atmósfera.
La creación de una ciudad en el desierto es una de las tareas más difíciles que puede afrontar el ser humano. Si encima se trata de idear un lugar que funcione sin emisiones de dióxido de carbono ni vehículos privados el reto roza lo imposible. Sin embargo, se trata de un proyecto real fruto de los petrodólares de los países del Golfo Pérsico.
Con su poderío económico, la Compañía de Energía Futura de Abu Dhabi (Masdar) de Emiratos Árabes Unidos (EAU) ha contratado al estudio de arquitectura Foster + Partners para que diseñe una población con esas características. Este proyecto forma parte de la denominada Iniciativa Masdar, una plataforma cooperativa global que busca soluciones tecnológicas en el ámbito de la sostenibilidad y la eficiencia energética.
La compañía árabe presentó sus planes recientemente en el Foro Mundial para la Energía del Futuro, que se celebró entre los pasados 21 y 23 de enero. La clausura del evento corrió a cargo del arquitecto Norman Foster, que ofreció diversos detalles del proyecto Masdar, cuya puesta de largo se produjo en Cityscape Abu Dhabi 2007. Su ambición es crear una ciudad de alta densidad y usos mixtos para atraer a los principales expertos mundiales.
Se trata de un nuevo desarrollo sostenible de seis millones de metros cuadrados que combina la planificación tradicional de las ciudades amuralladas con las tecnologías modernas para no emitir dióxido de carbono ni producir residuos.
El principio del desarrollo Masdar es crear una población amurallada construida en dos fases y de manera eficiente desde el punto de vista energético. La base del proyecto se apoya en la creación de una gran central energética fotovoltaica, que posteriormente se convertiría en el lugar para la segunda fase, permitiendo el crecimiento urbano y evitando la proliferación de la baja densidad en la expansión.
La emisión de dióxido de carbono se evitará al prescindir de los coches, ya que por la ciudad sólo podrán circular vehículos de transporte urbano. Para que esta solución sea factible se establecerá una red compacta de calles que incitará a caminar. De este modo, sus grandes paseos cubiertos y aceras estrechas crearán un entorno fresco y agradable para los peatones —a diferencia del clima extremo de la región— que también permitirá articular la naturaleza compacta de las ciudades amuralladas tradicionales. Además, se instaurarán una red de transporte rápido, entre cuyas paradas habrá una distancia máxima de 200 metros.
Estratégicamente localizada para la infraestructura principal de transporte de la ciudad del Golfo Pérsico, Masdar enlazará con las comunidades de los alrededores, así como con el centro de la capital y el aeropuerto internacional, a través de una red de carreteras ya existente y de nuevas rutas de transporte público y ferroviario.
La expansión también abarca los terreno de alrededor, que dispondrán de aerogeneradores, granjas fotovoltaicas y plantaciones, entre otras instalaciones. De este modo, la ciudad será completamente autosuficiente.
Finalmente, el programa incluye la construcción de una nueva universidad y de la sede de la Compañía de Energía Futura de Abu Dhabi, junto con la inclusión zonas económicas especiales y un centro de innovación.
Noticias relacionadas