Una nueva sede para Moratinos

Era increíble la situación de interinidad que se vivía en el Ministerio de Asuntos Exteriores: vaya, que parecía que desde que el ministro Miguel Angel Moratinos dejó el emblemático Palacio de Santa Cruz iban a estar de interinos permanentes. Pero no: en la navideña copa con los funcionarios, el pasado mes de diciembre, Moratinos comunicó a los informadores presentes la feliz noticia: ya tienen sede definitiva para el Ministerio.
La nueva sede ocupará una manzana en la madrileña calle Raimundo Fernández Villaverde, afectada al Ministerio de Defensa y justo al lado del complejo de Nuevos Ministerios y del Paseo de la Castellana, en pleno centro de Madrid. Zona céntrica donde las hayas e inmersa en la llamada "milla de oro" madrileña.
Previamente se había pensado en el Cuartel del Infante don Juan, en el Paseo de Moret, pero tuvo que desecharse por grandes imperativos, a pesar de que a juicio de Moratinos respondía adecuadamente a las necesidades de funcionamiento y organización del Departamento que dirige.
La nueva sede "presenta muchas ventajas respecto a otras, incluyendo el Paseo de Moret", ha llegado a comentar Moratinos. Por ejemplo, la oferta de transporte público (metro, autobuses, cercanías), lo céntrica que es la calle (una de las zonas más dinámicas y modernas desde el punto de vista urbanístico y comercial).
Bien es verdad que pocas sedes podían competir con el palacio de Santa Cruz en solera. No en vano, el edificio fue mandado construir en el siglo XVII por Felipe IV. Que el palacio hubiese servido para actos protocolarios municipales y cárcel desde tan lejanos tiempos es un valor añadido, si bien a los trabajadores este tipo de argumentos tampoco es que les llenasen de especial satisfacción. Por contra, la nueva sede, aunque más moderna y sin tanta personalidad, proporcionará a los funcionarios incluso una zona para la guardería para sus hijos. ¿Alguien da más?