Medianerías decoradas de las calles Montera, 22 y San Bernardo, 48
La contraportada
Madrid/ Pablo Sola
Redaccion | Lunes 20 de octubre de 2014
El Ayuntamiento de Madrid ha añadido a sus trabajos de rehabilitación urbana el de la decoración de las medianerías de la ciudad mediante la técnica del trampantojo, que convierte una pared lisa o desconchada en un mural hiperrealista que da vida y continuidad a la fachada. Acaban de inaugurarse las de Montera y San Bernardo.
Las medianerías son paredes que dan a la calle cuyo cuidado depende de la comunidad de vecinos a la que pertenece el edificio, lo que hace que generalmente sean zonas descuidadas y que cortan la continuidad de la fachada dejando un espacio liso y en blanco.
Se trata, generalmente, de "un espacio de todos y de nadie, pues cualquier ciudadano puede verlo pero nadie se ocupa de él", comenta el concejal de Vivienda y Rehabilitación Urbana del Ayuntamiento de Madrid, Sigfrido Herráez. "Lo normal es que su destino sea ser una pared desconchada o, como mucho, que se tape con un enfoscado de cemento", añade el concejal.
El Ejecutivo madrileño, en su afán por rehabilitar el casco histórico de la capital, ha añadido a los trabajos de mejora del pavimento, aceras e iluminación, la decoración de estas medianerías como un servicio más. Las dos últimas obras se inauguraron la semana pasada en el distrito Centro, en concreto en las calles Montera y San Bernardo, y han sido realizadas por el maestro pintor Alberto Porringelli.
En la calle Montera se han decorado dos medianerías. En el número 22 se ha realizado una escalinata de gran presencia con una fuga importante escalonada de edificios, y en el número 26 se ha representado una imagen "surrealista", según Sigfrido Herráez, compuesta por una fuga hacia la plaza Mayor presidida por un gran arco, bajo el cual circula una carroza que recuerda al Madrid de los Austrias de los siglos XVI y XVII.
La obra realizada en el número 48 de la calle San Bernardo se encuentra justo al girar la fachada donde hace esquina la librería Fuentetaja, y en ella se ha optado por imitar la fachada con el dibujo de dos ventanas correspondientes a los dos pisos y una barbería ocupando la planta baja.
"La verdad es que nos gusta mucho la iniciativa, antes lo que había allí era pared que se caía," han comentado los dependientes de la librería Fuentetaja, "ahora vamos a tener que arreglar nuestra fachada porque desluce".
La medianería está firmada por la Empresa Municipal de la Vivienda y por Ibercaja, que suscribieron un acuerdo el pasado año por el que la entidad se comprometía a subvencionar con 121.975 euros, la restauración y ornamentación de estas medianerías. Este ha sido el segundo convenio que el Ayuntamiento ha suscrito con esta entidad destinado a la decoración mural, gracias al primero se realizaron las de la plaza de los Carros, junto al Museo Municipal de San Isidro, y la de la plaza de Comandante La Moreras.
Los trabajos, que han durado dos meses y medio, se han llevado a cabo mediante la técnica del trampantojo, que consiste en una visión idílica, no real, pero hiperrealista, que se plasma con pintura sobre la pared. Es, en definitiva, un dibujo que insinúa la realidad y crea una prolongación en la visión de la fachada.
La elección de la empresa que realiza estos trabajos se realiza por concurso público, mediante los criterios de creatividad para el embellecimiento de la ciudad y de la mejor oferta económica que se realice.