El Principado aspira a triplicar los 6.300 metros cuadrados de paneles ya existentes
Redaccion | Lunes 20 de octubre de 2014
Todos los edificios públicos de la región se abastecerán de energía solar en un plazo no muy extenso de tiempo. Ese es el objetivo hecho público por el consejero de Industria, Jesús Urrutia, que avanzó su intención de triplicar los 6.300 metros cuadrados de paneles instalados en la actualidad a lo largo del Principado. De momento, en el 2003 comenzarán a funcionar otros 2.900 metros cuadrados.
De hecho, la voluntad expresada por el consejero ya se está cumpliendo en un buen número de centros municipales, tales como piscinas o polideportivos, que se alimentan de los paneles solares instalados gracias a las subvenciones que aporta el Gobierno regional. Esas ayudas, que se elevan hasta el 70% del coste total de los sistemas, ascendieron el pasado año 2002 hasta los 704.000 euros.
"La energía solar todavía es una de las menos utilizadas en Asturias", reconoció el propio Jesús Urrutia, que participó en Oviedo en la presentación de un CD sobre las posibilidades que abre esta fuente renovable de alimentación. No obstante, el consejero expuso la intención de su departamento de avanzar por este camino. "Hay quien dice que aquí los paneles no son muy eficaces, pero no es cierto; en Alemania tampoco hay mucho sol y son una potencia en la materia", apuntó.
El titular de Industria destacó asimismo que, dentro de su proyecto de potenciación de las energías renovables, la alternativa solar ocupa, al menos de momento, el último lugar en el escalafón. "En primer lugar están los recursos eólicos, después la biomasa, y a continuación la luz del sol", sintetizó. No obstante, indicó que entre las iniciativas de su departamento también se encuadra el establecimiento de negociaciones con la Consejería de Infraestructuras para dotar de paneles a los nuevos edificios en construcción.
SITUACION DE DEPENDENCIA Según Urrutia, la importancia de fomentar los recursos verdes toma especial relevancia si se tiene en cuenta que, en el marco de la Unión Europea, la dependencia de las importaciones energéticas es del 50%, "un porcentaje que se puede elevar hasta el 70% en los próximos años". De ahí la intención de optar por nuevas alternativas que se puedan combinar fácilmente con las fuentes tradicionales.
Pero las ventajas de las energías limpias no se quedan ahí. A juicio del consejero de Industria, la creciente popularización en su uso "contribuirá a crear más empleo, sobre todo en el campo de las pequeñas empresas". A pesar de todo, puso de manifiesto la dificultad existente a la hora de alcanzar los objetivos establecidos por la UE en esta materia.